El mundo municipal catalán cierra filas con la inmersión lingüística

El mundo municipal ha defendido este miércoles el modelo educativo catalán desde Santa Coloma de Gramenet en un acto organizado por la plataforma Som Escola. El encuentro ha tenido lugar días después de que el Gobierno central anunciara que estudiaba incluir la opción lingüística del castellano como lengua vehicular en la preinscripción escolar. El acto ha sido la antesala a las manifestaciones que la organización ha convocado para la tarde del miércoles enfrente de los ayuntamientos.

El acto ha reunido a representantes municipales de casi todos los partidos quienes han hecho un llamamiento a “consolidar, proteger y mejorar” la escuela catalana y combatir los intentos del Gobierno central de “desestabilizar” la sociedad usando la lengua como instrumento político.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha enviado un mensaje directo al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. “Que no se equivoque. Por muchas trampas como el 155 que quieran alterar las reglas del juego, aquí encontrará una sociedad unida y plural en defensa de un modelo educativo de éxito. No queremos una sociedad dividida y no lo conseguirán”, ha reivindicado.

También la vicepresidenta de la Federació de Municipis de Catañunya (FMC) y alcaldesa de Montcada i Reixac, Laura Campos, ha remarcado la necesidad de mantener una sociedad que no esté dividida en función de su origen o su lengua. Así lo ha hecho también la alcaldesa de Sant Vicenç dels Horts, Maite Aymerich, quien ha subrayado la importancia de la diversidad en las escuelas.

Para la alcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, añadir en los colegios un nuevo elemento de “segregación” sería un error y ha avisado de la amenaza que suponen para la democracia los ataques a la lengua.

El alcalde de Sant Climent de Llobregat y miembro de la Asociación Catalana de Municipios (ACM), Isidre Serra, ha asegurado que el modelo de inmersión garantiza el dominio de los alumnos del catalán y el castellano y ha avisado que si “alguien se lo quiere cargar” se encontrará a las instituciones pero también a la ciudadanía para plantar cara ante cualquier ofensiva contra la escuela o la lengua catalanas.

Los alcaldes metropolitanos han aprovechado la ocasión para reivindicar que más allá de las diferencias políticas, la unidad ante la defensa del modelo educativo catalán es innegociable.