El Síndic denuncia insuficiente atención psicológica a los niños

Los niños cada vez necesitan más atención psicológica. Entre el 2010 y el 2015, según datos facilitados por la Conselleria de Salut, se incrementó en un 29% el número de pacientes menores de edad. Este aumento ha provocado que los recursos públicos que pueden tratarlos deban repartirse entre una población mayor. Si en el 2010 cada paciente recibía una media de 6,5 visitas anuales, en el 2015 esta cifra se redujo hasta 5,9.

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, durante la presentación del 'Informe Anual sobre los Derechos del Niño' del 2016, ha recordado este viernes que si la salud mental acostumbra a ser "la cenicienta" en el sector sanitario, al referirse a la atención que reciben los menores aquejados de algún trastorno mental se debe hablar forzosamente "de la cenicienta por excelencia".

Según diversas familias han hecho notar a la oficina del Síndic durante el presente curso, sus hijos, diagnosticados de trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH), no están recibiendo el tratamiento que necesitan debido a la alta demanda que existe actualmente. Maria Jesús Larios, adjunta en defensa de los derechos de los niños y los adolescentes, ha pedido además que se lleve a cabo un debate entre profesionales sobre este trastorno en concreto. El procedimiento actual genera discrepancias entre los profesionales y provoca diferencias de entre el 20% y el 30% de diagnosticados en función del centro de salud mental infantil y juvenil (CESMIJ) al que se acuda.  

"CAMBIOS ESTRUCTURALES"

El balance general de Ribó es que en materia de cuidado de los menores no se requieren "algunas mejores" sino "cambios estructurales". Ribó insta a los departamentos de la Generalitat vinculados a los aspectos detallados a destinar más recursos económicos y humanos que contribuyan al progreso. 

Entre las demandas, el organismo ha puesto el foco en el combate contra la pobreza infantil. En el 2015, entre los jóvenes menores de 16 años, se situaba en tasas del 30% en lo relativo a la de carácter moderado y del 11 % a la más severa.

Entre los colectivos más vulnerables se encuentran los conocidos como niños de la cola, para los cuales ha pedido protocolos para garantizar una "detección a tiempo" del problema de adicción, un tratamiento médico y psicológico para "combatir la adicción" y un plan de adecuación de los menores a los centros escolares donde realizan su formación. En muchos casos el nivel educativo que se les adjudica no coincide con el suyo propio, lo que desencadena problemas añadidos. 

La institución también ha pedido cambios en el sistema educativo para favorecer el mejor aprendizaje de los niños en situación de vulnerabilidad. El Síndic ha recordado que se mantienen los problemas de segregación en las aulas ya que desde el 2008 no ha habido mejoras constatables -un fenómeno que aglutina a la mayoría de alumnos con necesidades específicas en determinados centros- y ha advertido que algunos padres han denunciado casos de acoso entre alumnos de carácter homofóbico y transfóbico.

Entre los puntos claves de este balance anual, el Síndic también ha llamado a utilizar más el recurso de la familia de acogida porque se ha demostrado su utilidad. 

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