Afers Socials presume de haber destapado la red de pederastas que captó a siete menores tutelados

La ‘consellera’ de Afers Socials i Família, Dolors Bassa, el secretario del departamento, Francesc Iglesies, y el responsable de la Direcció General d’Atenció a la Infància i l’Adolescència (DGAIA), Ricard Calvo, se han puesto hoy una medalla y han presumido del buen hacer y la “pericia” de los educadores del CRAE de Tortosa, que permitieron poner en aviso a los Mossos de la existencia de una red de pederastas que operaba en cuatro países y en numerosas ciudades españolas para que procedieran a su desarticulación.

El grupo criminal, que estaba activo desde hace 14 años, había explotado sexualmente a 80 menores de entre 12 y 17 años (de los que 29 han sido identificados), además de comercializar el material pedófilo audiovisual de sus encuentros sexuales. Al menos siete de los adolescentes afectados habían estado o están bajo la tutela de la Generalitat y fueron las revelaciones que dos de ellos hicieron a los educadores del centro de Tortosa lo que permitió poner en marcha la operación policial en mayo del 2015. 

Iglesies y Calvo han asegurado que era "imposible" o "muy complicado" haber evitado que esos chicos bajo la responsabilidad de la Generalitat se pusieran en contacto con la red pederasta por el hecho de que esa organización presuntamente disponía de una estructura que facilitaba la movilidad y tenían contactos en varios países y comunidades autónomas.

ORGANIZACIÓN CRIMINAL ESPECIALIZADA

“Estamos hablando de una organización criminal que tiene su pericia en detectar a víctimas potenciales entre adolescentes muy vulnerables”, ha destacado Iglesies, que ha insistido en que los pederastas buscaban a sus víctimas en el entorno de familias desestructuradas. Ninguno de los responsables de Afers Socials ha podido precisar cuánto tiempo permanecieron los menores en contacto con esa organización. "No disponemos de esa información", se han limitado a reconocer.

La paradoja del caso, sin embargo, es que la propia DGAIA, que no ha podido evitar que algunos de sus protegidos cayeran en manos de esa red de pederastas, deberá revisar ahora la situación de las familias cuyos hijos también resultaron afectados por si procede o no retirarles la tutela de los mismos por esa falta de vigilancia.

Además de sumarse a los elogios a los educadores de Tortosa, la 'consellera' Bassa también ha pedido en las redes sociales que se deje de hacer demagogia y de alimentar el morbo con este caso, por el que han pedido explicaciones a la Generalitat la oposición y el Síndic de Greuges. La responsable de Benestar Social ha anunciado que el próximo mes de septiembre comparecerá en el Parlament para dar todos los detalles de lo sucedido.