La gran cita de la juventud católica

El Papa despacha a Rajoy en menos de 10 minutos

MANUEL VILASERÓ
MADRID

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E l Vaticano se ciñe con tozudez al guión de un viaje despolitizado, autodefinido como exclusivamente pastoral. Si el viernes el Papa se despidió de José Luis Rodríguez Zapatero sin reabrir viejas heridas, ayer departió menos de 10 minutos con el líder de la oposición, Mariano Rajoy, al que trató como un peregrino más. De las futurascontrarreformasdel inminente Gobierno del PP, ni una palabra. Los portavoces de la curia romana echaron, además, agua al vino de la alegría gubernamental por su supuesta buena acogida al proyecto de reforma del Valle de los Caídos. La prudencia manda cuando se avecina una cruenta contienda electoral.

Podía esperarse que Rajoy aprovechara para poner sobre la mesa su lista de enmiendas a la gestión de Zapatero, con la rectificación de la ley del aborto a la cabeza, pero ni el presidente del PP está dispuesto a concretar su programa, aunque se lo pida el Papa, ni este mostró el menor interés en ser utilizado por los conservadores. Ni siquiera hubo mesa sobre la que dialogar. El Pontífice sentó a su lado durante unos breves minutos al aspirante a la jefatura del Gobierno en unas dependencias de la catedral de Madrid, tras oficiar una misa.

El político popular aprovechó para presentar al Pontífice a su mujer y a su hija y habló con él de la «necesidad de trabajar todos juntos por una sociedad mejor», según contó a la salida, tras asegurar que «la reunión» había sido «muy emocionante y un gran honor».

REGALOS 'LOW COST' / El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, ya había advertido el día anterior que no se trataba de una entrevista o de una audiencia, sino de un simple saludo a «un peregrino», a «un creyente» que había acudido a La Almudena y quería «mostrar su respeto a la personalidad del Santo Padre». Ayer se vio obligado a precisar que el Papa no había recibido a Rajoy como a Zapatero en la Nunciatura, el lugar donde se hospeda en Madrid, porque en España no está institucionalizada la figura del jefe de la oposición. Rajoy no ejerce ningún cargo público, recordó.

Pese a no tratarse de un encuentro oficial, sí hubo intercambio de regalos, aunquelow cost, acorde con los tiempos. El político gallego le ofrendó un CD recopilatorio de cantos gregorianos del Monasterio de Silos porque «es un recuerdo muy bonito y muy significativo de lo que es España» y el Papa le respondió con un rosario y una medalla.

Lombardi también fue el encargado se poner en su sitio al Gobierno. Tras la comida mantenida el viernes, entre otros, por el ministro de la Presidencia, Ramón Jaúregui, y el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarsicio Bertone, el primero hizo saber que su interlocutor había acogido con «enorme comprensión y máxima receptividad» el proyecto de reconversión del Valle de los Caídos en un lugar de «memoria reconciliada».

ETA Y LA IGLESIA VASCA / «Se escuchó con mucha atención, pero sin ningún tipo de posición o respuesta por parte del Vaticano. Hay que profundizar y tratar estos temas, pero no obviamente en un almuerzo de cortesía como el que mantuvimos», respondió ayer el portavoz vaticano. Este se refería también a la invitación de Jaúregui a que el Vaticano medie para que la Iglesia vasca se implique en el final de ETA con un mensaje pastoral reconciliador que contribuya a superar las «graves heridas» que el terrorismo ha infligido a la sociedad vasca. Sobre esta cuestión tampoco «puede hablarse de ninguna decisión explícita por parte del Vaticano», insistió Lombardi.