TRAS LA CARGA DE LOS MOSOS EN BARCELONA EL VIERNES

Felip Puig responsabiliza a los medios de cuestionar el trabajo de los Mossos

Felip Puig en Valls

Felip Puig en Valls / Jaume Sellart

EUROPA PRESS / Valls

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Elconseller de Interior de la Generalitat,Felip Puig, haacusado a losmedios de comunicación de poner en duda a los Mossos d'Esquadra, después de la intervención policial del viernes en laacampada del 15-Men la plaza de Catalunya de Barcelona.

"No se puede estar poniendo en duda permanentemente eltrabajo, la calidad, la solvencia y la entrega de la policía del país", aunque admite estas críticas a quien tiene la responsabilidad, ha dicho en su discurso durante la celebración en Valls (Alt Camp) del Dia de les Esquadres, que le lleva estos días por toda Catalunya para el homenaje anual a las fuerzas de seguridad.

"Si ha de haber algún debate, se ha de llevar a lo político", ha dicho Puig en el Centro Cultural Municipal de Valls. Elconseller ha explicado que los medios de comunicación no han encontrado"el punto de equilibrio".

Legitimidad de los Mossos

El responsable de Interior ha lamentado que muchosmossos quesufrieron alguna contusión el viernes"no salen en los medios", en referencia a los 37 agentes heridos del total de 121 que hubo en los disturbios.

"Lasúnicas personas que en este país estánlegitimadas --solo cuando es necesario--para utilizar la fuerzasois vosotros", ha dicho ante los agentes durante el acto, y ha añadido que, si esto se pone en duda porinterpretación interesada, no se podrá construir bien Catalunya.

Elconseller ha prometido que, "pase lo que pase", los Mossos tendrán lascondiciones necesarias parahacer su trabajo, que ha calificado detrascedente, delicado y complicado. Después del acto se ha hecho a la salida del edificio unaexhibición de castellers durante la cual un centenar de jóvenes han protestado ruidosamente contra elconseller por la actuación policial del viernes en Barcelona.

Silbidos, abucheos y cacerolas

“Que salga, que dé la cara”, gritaban a Puig porque elconseller no había salido aún del edificio y, cuando lo ha hecho minutos después, ya no se ha encontrado con los manifestantes. Losindignados han recibido a Puig a primera hora al grito de“¡Dimisión!”, y durante todo el acto han seguido a las puertas del Centro Cultural. Los concentrados, a un lado de la entrada del edificio, han respetado ellímite marcado por la policía y elconseller ha entrado a unos 20 metros de ellos sin producirse incidentes.

Junto al grito de “¡Dimisión!”, se han oídosilbidos, abucheos y cacerolas, y algunos jóvenes han llevadoclaveles mientras eran vigilados por una docena demossos. Entre las pancartas han destacado dos:“Pim pam Puig” y “Peligro políticos. Trabajan por el interés general del orden público”.

Losconcentrados, a un lado de la entrada del edificio, no han sobrepasado ellímite marcado por lapolicía, y Puig ha pasado a unos 20 metros de ellossin producirse incidentes. Además del grito de “¡Dimisión!”, se han oídosilbidos,abucheos ycacerolas entre los jóvenes, algunos de los cuales han llevadoclaveles.

Entre las pancartas destacan dos:“Pim pam Puig” y “Peligro políticos. Trabajan por el interés general del orden público”. Una docena demossos uniformados y dos furgones policiales han custodiado el centro en el que se ha celebrado el acto.