LAS AFECTACIONES POR LA VISITA PAPAL

LAS QUEJAS DE LOS VECINOS

Los vecinos de Barcelona expresan sus opiniones y quejas sobre las repercusiones de la visita del Pontífice en su vida cotidiana

EL PERIÓDICO

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La visita del Pontífice a la ciudad provoca diversas alteraciones en la vida cotidiana de los barceloneses. Desde el 3 de noviembre hasta la tarde del día 7, los alrededores de la Sagrada Família se ven afectados por los cortes de tráfico y otras restricciones. Los vecinos de Barcelona opinan y reflexionan sobre las repercusiones que ha tenido la visita de Benedicto XVI en su vida cotidiana. Este es un resumen de las aportaciones más destacadas de los lectores.

REFLEXIONES RECIBIDAS EL 6 DE NOVIEMBRE 

A. Torre, Barcelona

Solo le fastidia a los progres.

Albert Gómez, Barcelona

Primero nos quitan todas y cada una de las plazas de aparcamiento del barrio sin darnos alternativa alguna para poner unas sillitas para según ellos invitados, para mi beatos del Opus y cia. Después tenemos que ir documentados en la calle donde hemos vivido toda nuestra santa vida (lo de santa va de recochineo por las circunstancias). A ver, con la crisis que tenemos, por qué ha tenido que venir este personaje pregonando, con el coste que nos está suponiendo a todos y cada uno de nosotros.

Nicolas Salvado, Barcelona

Hola, vivimos dentro de la zona de seguridad en la calle Còrsega. Aquí tiene un álbum fotos originales del off de la visita.

Javier Cuchí, Barcelona

Vivo a menos de doscientos metros del edificio del Nen Déu que Ratzinger visitará mañana por la tarde. Este edificio es paso casi obligado para ir al Hospital de Sant Pau, en el que mi padre está ingresado después de una intervención quirúrgica importante y grave. Desde hace TRES DÍAS --escribo en sábado-- la presencia policial es importante y molesta. Ayer, al atardecer, en las aceras del edificio en cuestión, los urbanos ya estaban requiriendo documentación a grupos de jóvenes (que, además, tenían una apariencia del todo normal).

El cerco policial verdaderamente soviético que nos han echado encima por la visita de ese señor es absolutamente irritante e indignante y, además, sospecho que innecesario. El tema de la seguridad --como estamos viendo, por más cotidiano ejemplo, en los aeropuertos-- acaba no siendo más que un pretexto para dar barra libre a las paranoias de los pistoleros con placa pública y privada y para que otros ubicados mucho más arriba vayan estableciendo --con un efecto acumulativo: ora por un happening papista, ora por unos comerciantes quejosos de tironeros-- cercos de control al ciudadano cada vez más estrechos y más agobiantes.

Nieves Hernández Santos, Rubí

Sí me afectan, voy a clases de baile en la calle Marina los sábados, y me han dicho que para poder acceder a la zona necesito una acreditación de la escuela. Me parece muy bien que venga el Papa, lo que no me parece tan bien es el dinero que se están gastando (que también es mío) y encima pierda unas clases que también estoy pagando. Es muy triste que nos tengamos que acreditar para que se pasee este señor. Si tanta fe tiene, que confíe en que Dios le protegerá de todo y no moleste a los demás.

Francisco Garcia Meseguer, Barcelona

Es lo mismo de cada día pero multiplicado por mucho, esta ciudad de los pijo progres, vendida a los turistas, a las grandes empresas, a los negocios sucios y ahora al Papa, siempre por encima de los ciudadanos. Qué podemos esperar de un heredero que nos engaña incluso con su no boto.

Shakira Benavides Gomez, Barcelona

Yo trabajo en una tienda en el barrio del Raval. Hace tres días nos tenían que llegar tres paquetes de Estados Unidos, solo nos sirvieron uno, por lo que llamamos ayer por la mañana para reclamar los otros dos, nos respondieron que esa misma tarde lo recibiríamos. Pero la sorpresa llegó la misma tarde de mi llamada, cuando la compañía de transportes nos llamó para decir que no podía entregar los bultos esa misma tarde, ya que habían sido retenidos y bloqueados todo tipo de entregas por cuestiones de seguridad en relación con la visita de su "santidad". Lo mismo pasó con otra entrega de otra compañía, y lo mismo nos confirmaron.

Fernando de la Torre, Barcelona

Habiendo eliminado tantos aparcamientos en la zona, lo menos que podía haber hecho el Ayuntamiento era liberar las zonas azules y de carga y descarga para compensar.¿Donde se supone que los vecinos hemos tenido que aparcar nuestros coches? No han dado ninguna alternativa a ese problema.

Marta Siscar Lloréns, Barcelona

Aunque no soy barcelonesa, estoy aquí estudiando desde el pasado septiembre. Es cierto que los cortes de calles están siendo fastidiosos, pero la seguridad no es más excesiva que como lo hubiera sido en cualquier otro acto con la consiguiente afluencia de masas y de personalidades públicas. Es un gasto importante, seguro que se podría buscar la forma de simplificarse. Pero, ¿se imaginan un atentado en Barcelona en el que fallecieran el Papa, los Reyes y algunos ministros, amén del presidente Montilla y demás personalidades presentes, así como los miles de personas que acudirán al acto? Porque hay amenazas contra los cristianos por parte de Al-Qaeda. Es mejor invertir en seguridad y evitar desgracias, aunque nos cueste dinero público y ciertas incomodidades. Además, seguro que con todo el despliegue pontificio, se habrán creado puestos de empleo...