Rouco dice que las muertes pueden ayudar a las familias a "renovar la propia vida"

El cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, ha dicho hoy que las 12 muertes en el accidente de Castelldefels pueden ayudar a las familias a "renovar la propia vida", a la vez que les reclamó una "actitud de esperanza, de consuelo y de un dolor" que, según puntualizó, "se puede convertir en oración".

El cardenal subrayó que esta "tremenda" situación "al final es superable". "No digo que sea reversible, porque la muerte no tiene marcha atrás, pero es superable e incluso se puede convertir en un instrumento para renovar la propia vida en esperanza y en actitudes de generosidad y de donación", señaló.

En este sentido, el cardenal se dirigió a las familias de las víctimas que, a su juicio, "han padecido una forma de morir tan tremenda" y les aseguró que "sus familiares, viven". "Viven y van a vivir eternamente y un día nos vamos a encontrar con ellos más allá del tiempo y de la muerte", añadió. Asimismo, monseñor Rouco Varela señaló que hay que "rezar por ellos" e instó a las personas cercanas a los fallecidos a tener una "actitud de esperanza, de consuelo y de un dolor" que "se puede convertir en oración".

Sistach pide oraciones el domingo

El cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, ha transmitido en nombre propio y en el de su archidiócesis su solidaridad y duelo para con las familias de las víctimas del accidente ferroviario que tuvo lugar ayer en Castelldefels.

Sistach, que recordó que reza por las víctimas y los heridos, pide a las comunidades cristianas de la archidiócesis que, sobre todo en la misa de domingo, recen por el "eterno descanso de las víctimas y la pronta recuperación de los heridos", según informaron en un comunicado.

Asimismo, el obispo de Sant Feliu de Llobregat, Agustín Cortés Soriano, traslado la solidaridad y pone a disposición de los afectados "toda la ayuda que esté a su alcance".