Psicología

Cinco consejos para volver a conectar con la pareja después de tener hijos

La intimidad se deteriora con los cambios familiares

Pareja feliz

Pareja feliz / 123RF

Ángel Rull

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La llegada de un hijo es uno de los momentos más significativos en la vida de una pareja. Es un evento que llena de alegría y emoción, pero también puede traer consigo problemas que afectan la relación de pareja. La dinámica de la relación cambia, y los roles y responsabilidades se modifican, lo que puede dar lugar a un mayor distanciamiento emocional. Es fundamental comprender estos cambios para poder abordarlos de manera efectiva.

Cuando se convierten en padres, las parejas a menudo se encuentran con un nuevo conjunto de retos que pueden afectar su relación. La atención que antes se centraba principalmente en el uno al otro, se desplaza hacia el bebé. Las noches sin dormir, las preocupaciones sobre el bienestar del niño y la necesidad de establecer una rutina pueden llevar a un desequilibrio en la relación de pareja. La comunicación disminuye, y la intimidad puede sufrir.

¿Es frecuente un mayor distanciamiento?

Es bastante común que las parejas experimenten un mayor distanciamiento después de tener hijos. La llegada de un bebé suele requerir una redistribución de tiempo y energía, lo que a menudo lleva a una disminución en la atención y el cuidado mutuo. Las noches en vela, las preocupaciones y las nuevas responsabilidades pueden hacer que la relación de pareja quede en un segundo plano. Esto puede dar lugar a tensiones y a una sensación de desconexión.

Este distanciamiento puede ser temporal y es en gran medida una respuesta natural a los cambios significativos en la vida de una pareja. Es importante reconocer que esta es una etapa que la mayoría de las parejas atraviesan, y no es indicativo de un problema subyacente en la relación. Sin embargo, si no se aborda de manera efectiva, el distanciamiento puede llevar a problemas más graves a largo plazo.

¿Se puede volver a conectar?

Aunque es normal experimentar un distanciamiento después de tener hijos, es posible volver a conectar con tu pareja y fortalecer la relación. El papel de los padres cambia drásticamente. Las discusiones sobre los pañales, la alimentación y el sueño del bebé se vuelven prioritarias. A menudo, la pareja se siente abrumada por la cantidad de trabajo que implica criar a un hijo, y el tiempo de calidad juntos se reduce. La falta de sueño y las tensiones adicionales pueden provocar disputas más frecuentes.

Estos cinco consejos te ayudarán a reconstruir la intimidad y la complicidad en tu relación de pareja:

1. Comunicación abierta y honesta

La base de cualquier relación sólida es la comunicación. Después de tener hijos, es fundamental mantener un diálogo abierto y honesto. Hablar sobre tus emociones, preocupaciones y expectativas puede ayudar a evitar malentendidos y resentimientos. Asegúrate de escuchar a tu pareja de manera activa y comprensiva, creando un espacio donde ambos se sientan escuchados y valorados.

La comunicación efectiva implica expresar tus sentimientos y pensamientos de manera respetuosa. Evita la crítica y el lenguaje negativo, y en su lugar, enfócate en "yo" en lugar de "tú". Por ejemplo, en lugar de decir "Siempre llegas tarde", puedes decir "Me siento frustrado cuando llegas tarde". Esto permite una conversación más abierta y constructiva.

2. Tiempo de calidad juntos

A pesar de las demandas de la crianza de hijos, es esencial encontrar tiempo de calidad para compartir en pareja. Programa citas regulares o momentos especiales para conectarte emocionalmente. Esto puede ser tan simple como una cena tranquila en casa después de que los niños se hayan acostado o un paseo juntos en el parque. Estos momentos refuerzan la conexión y ayudan a mantener viva la chispa de la relación.

La planificación de tiempo juntos es esencial. Puede implicar la coordinación con familiares o amigos para que cuiden a los niños mientras ustedes disfrutan de un tiempo a solas. También es importante ser flexible y adaptarse a las circunstancias cambiantes de la vida con niños. En lugar de esperar una ocasión especial, encuentren formas de disfrutar de pequeños momentos juntos en la vida cotidiana.

3. Distribución equitativa de responsabilidades

La crianza de hijos implica una gran cantidad de tareas y responsabilidades. Es crucial que ambas partes se sientan involucradas y apoyadas en este proceso. Trabajar juntos para establecer una distribución equitativa de las responsabilidades, desde el cuidado de los niños hasta las tareas domésticas, puede reducir la tensión y permitir que ambos miembros de la pareja se sientan valorados.

La equidad en la distribución de las responsabilidades es fundamental para mantener un equilibrio en la relación. Tener discusiones abiertas sobre quién se encargará de qué tareas y establecer un sistema que funcione para ambos puede aliviar la presión. Recuerda que la crianza de los hijos es una responsabilidad compartida y que ambos padres deben estar involucrados de manera activa.

4. Mantener la intimidad física y emocional

La intimidad es un componente esencial en cualquier relación de pareja. Después de tener hijos, puede ser un reto mantenerla. Sin embargo, es importante encontrar momentos para la intimidad, tanto física como emocional. Mantener el afecto, los abrazos y los besos es fundamental, al igual que hablar sobre tus deseos y necesidades en el ámbito sexual.

La intimidad no se trata solo de la relación sexual, sino también de la conexión emocional. Asegúrate de expresar tus sentimientos y mostrar cariño. Hablar sobre tus necesidades sexuales y estar dispuesto a escuchar las de tu pareja es esencial para mantener una vida sexual satisfactoria. La comunicación abierta y la empatía son clave en este aspecto de la relación.

5. Cuidado personal

No puedes cuidar de tu pareja si no te cuidas a ti mismo. La autoestima y el bienestar personal son clave para mantener una relación saludable. Encuentra tiempo para actividades que te hagan sentir bien contigo mismo, ya sea haciendo ejercicio, pasando tiempo con amigos o disfrutando de tus pasiones. Un "tú" feliz contribuirá a una relación más feliz.

El autocuidado es fundamental para mantener la salud mental y emocional. No descuides tus propias necesidades y deseos. La realización personal y la satisfacción en tu vida individual se reflejarán en la relación de pareja. Encuentra un equilibrio entre tus responsabilidades como padre y las actividades que te hacen sentir completo como individuo.

Como vemos, la llegada de los hijos puede suponer un reto para la relación de pareja, pero con esfuerzo y compromiso, es posible volver a conectar y fortalecer la conexión emocional. La comunicación, el tiempo de calidad, la distribución equitativa de responsabilidades, la intimidad y el cuidado personal son elementos esenciales en este proceso. Recordemos que una relación de pareja sólida es un cimiento importante para el bienestar de la familia en su conjunto. La comprensión mutua y el esfuerzo conjunto son clave para superar los problemas que surgen con la llegada de los hijos y fortalecer la relación de pareja a lo largo del tiempo.

* Ángel Rull, psicólogo.