Las visitas al Ecometrópoli de Santa Coloma han incrementado un 15% durante el 2019

Casi 18.500 personas visitaron el centro de educación ambiental Ecometrópoli de Santa Coloma de Gramenet durante el 2019, un 15% más que en 2018, y un 38% que en 2017. “Unas cifras muy positivas”, según el Ayuntamiento colomense, que denotan la sensibilización e interés creciente tanto desde ámbito educativo como desde la ciudadanía en la protección del medio ambiente y la biodiversidad del entorno más cercano.

La gran mayoría de las visitas, unas 15.000, fueron alumnos de Educación Infantil, Primaria y Secundaria de Santa Coloma, que asistieron a talleres y actividades en todos los ámbitos de las ciencias naturales durante el horario lectivo. Lo hicieron dentro del Programa de actividades Educativas Complementarias (PAECC), una iniciativa del Ayuntamiento que hace 39 años que está en funcionamiento y que está dirigida a todas las escuelas públicas y concertadas de la ciudad. Son los centros los que eligen entre las diferentes actividades programadas anualmente.

Durante los fines de semana también se realizan actividades en Ecometrópoli dirigidas principalmente al público familiar. En 2019 asistieron unas 920 personas. Aunque también se reciben peticiones de asociaciones, centros abiertos, centros cívicos y otros colectivos (742 el año pasado), así como niñas y niños provenientes de actividades de verano (1057).

¿Qué es Ecometrópoli?

Ecometrópoli es el centro de educación ambiental del Ayuntamiento, inaugurado en marzo de 2011, que se encuentra ubicado en el pabellón Montserrat del Recinto Torribera, en un enclave privilegiado en uno de los accesos del Parque de la Sierra de Marina. 

Sus objetivos son sensibilizar a la población colomense y metropolitana sobre la importancia de la protección del medio ambiente y dar a conocer la biodiversidad existente en el entorno natural de la ciudad. 

El centro cuenta con varios espacios donde se pueden trabajar diferentes temáticas, como un huerto doméstico ecológico, un parque de movilidad sostenible y educación vial, un aula de ecología doméstica, o una exposición permanente titulada "El Bosque", donde están representados los hábitats de la Sierra de Marina y el río Besòs, entre otros.

Además de los talleres y actividades para el alumnado, el centro desarrolla la vertiente educativa del programa municipal de protección y de recuperación de fauna salvaje y es el punto de partida para la introducción de diferentes especies protegidas, tales como el Cernícalo común (Falco tinnunculus) o la Lechuza (Tyto alba). En diferentes espacios del centro, también se pueden disfrutar de otras instalaciones como un hormiguero, diferentes hoteles de insectos, cajas nido, etc.

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