TRADICIONES

Berga ya respira Patum, la ancestral fiesta del Corpus

El miércoles empiezan cinco días de actos con las comparsas, la música, los bailes y el fuego como protagonistas  

La Patum de Berga 2023

La Patum de Berga 2023 / ACN

Anna Costa

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La celebración de la fiesta del Corpus en Berga tiene nombre propio: la Patum. Hay quien dice que es una fiesta que no se puede explicar con palabras, que es un sentimiento y, como tal, se tiene que vivir. También se dice que los bergadanes notan en la piel que se acerca la fiesta, que pueden sentir la vibración del sonido del tabal (tambor) acercándose. Ciertamente, en Berga ya se respira Patum. El miércoles, 29 de mayo, estallarán cinco días de fiesta grande. Hasta el domingo, 2 de junio, Berga disfrutará con intensidad y pasión de la Patum, una fiesta sorprendente, única en Catalunya.

Símbolo por excelencia de la identidad bergadana, la Patum es una fiesta que tiene sus orígenes en los entremeses que acompañaban la procesión del Corpus en el siglo XIV y que englobaría elementos ya existentes desde tiempos inmemoriales. 

El fuego es uno de los elemento más representativo de la Patum, los saltos de plens (en la foto superior) son la apoteosis de la fiesta, con diablos cargados de fuego que llenan de color y olor a pólvora la plaza de Sant Pere. En este escenario, el jueves y el domingo también saltan y bailan rodeados de miles de personas el resto de comparsas de la Patum, como por ejemplo los Turcs i Cavallets, las Guites, los Gegants y la Àliga, la figura más señorial de la celebración, que baila con una solemnidad que captura la atención de bergadanes y visitantes. El miércoles y el sábado, la fiesta se convierte en un pasacalles que recorre a las calles y plazas de la población. La música, por otro lado, juega un papel crucial en la celebración, guiando los pasos de las comparsas y elevando el espíritu de los asistentes. Desde el repique del tabal hasta las melodías que acompañan a las figuras, la música es el hilo conductor que une todos los elementos de la Patum.

Más de 600 años de historia

El 25 de noviembre de 2005, un jurado internacional reunido en la sede de la Unesco en París publicaba la lista de formas de expresión cultural que se convertían en Obras Maestras del Patrimonio Oral e Inmaterial de la Humanidad. Entre las elegidas figuraba la Patum de Berga, por su singularidad y valor artístico e histórico. Era la primera manifestación popular que obtenía este reconocimiento en Catalunya y segunda en España después del Misterio de Elche. La obtención de tal reconocimiento supone para la Patum un elemento más para mantener la esencia de una fiesta que atrae a miles de personas y que tiene el futuro garantizado. Una muestra de ello es la cantidad de niños que participan y viven con emoción la Patum infantil. Es la cantera de una fiesta con más de 600 años de historia, una tradición que ha sabido preservar su esencia a través de los siglos. Se ha mantenido vibrante y vital, atrayendo a visitantes de todo el mundo. 

Existe una jornada exclusiva para los niños. El viernes se celebra La Patum infantil, formada por los mismos elementos que la de los adultos pero con dimensiones más reducidas. Por la mañana, un pasacalles anuncia el inicio de las actividades y a partir de aquí, toda la jornada sigue a rajatabla las tradiciones: comparsas, bailes y petardos, aunque todo con la garantía y seguridad adecuadas para los más pequeños. 

La programación puede consultarse en la página web lapatum.cat.