Los partidos prometen a las empresas "estabilidad" tras encadenar cuatro adelantos electorales en Catalunya

Ahora sí, tras cuatro adelantos electorales consecutivos en la última década en Catalunya, todos los candidatos a la presidencia a la Generalitat han prometido estabilidad para la próxima legislatura. Ahora solo falta que cumplan con su palabra una vez conocidos los resultados del 12 de mayo, que según trazan las encuestas plantean un Parlament con siete partidos con representación, sin una mayoría absoluta y una aritmética de pactos compleja. 

Los cabeza de lista de PSC, ERC, Comuns y PP y el número 3 de Junts (la CUP y Vox han rechazado participar) han celebrado este lunes el primer debate preelectoral, organizado este por la patronal Pimec. En el mismo han exhibido consensos sólidos de cara a reforzar la formación profesional, reducir de la burocracia para las pymes -conscientes del auditorio que les escuchaba- y una mayor inversión en desalinizadoras, para combatir la actual sequía y las que vendrán. Por el contrario, las mayores diferencias han venido por la carpeta de cómo reformular la financiación autonómica y qué inversiones necesita o no Catalunya.

Los frentes que han abierto los partidos entre ellos han sido los previsibles en este primer debate. El president Pere Aragonès ha defendido la tarea hecha durante la legislatura que finaliza y ha prometido profundizar en la misma. Salvador Illa se ha presentado el como el mejor interlocutor con el Gobierno central y ha prometido que si es president finalizará la B-40 íntegramente. Josep Rull, que ha comparecido en sustitución de Carles Puigdemont, ha querido abanderar la colaboración público privada y ha prometido “desburocratizar y regular mejor”. 

Jessica Albiach, candidata de los ‘comuns’, ha sacado pecho de su decisión de tumbar los presupuestos por no renunciar estos al casino del Hard Rock -casi literalmente, dada la camiseta que ha lucido ‘Tax Casinos’- y quien ha prometido suprimirle los beneficios fiscales. El candidato del PP, Alejandro Fernández, ha cargado duramente contra las “exquisiteces medioambientales” que bloquean las inversiones y obras en infraestructuras que requiere un país lastrado por la “voracidad” recaudatoria de la Generalitat.

Alrededor de 200 empresarios se han reunido este lunes en el centro cultural del Born para conocer las propuestas económicas de los partidos políticos (dada la necesidad de pactos para armar mayorías que trazan todas las encuestas). El refuerzo de la formación profesional puede darse por descontada, dado el amplio consenso exhibido. El candidato del PSC ha prometido crear 10.000 nuevas plazas públicas, mientras que Rull, Albiach y Fernández han insistido en mejorar la conexión entre oferta formativa y necesidades empresariales. Aragonès, por su parte, ha lamentado que “muchas propuestas que se hacen hoy aquí estaban en los presupuestos que se tumbaron hace unas semanas”.

La sequía, principal preocupación de los catalanes, según las últimas encuestas del CEO, también ha tenido un rol protagónico. Todas las fuerzas creen que Catalunya necesita más desalinizadoras, mientras que algunas fuerzas, como el PP, añaden la necesidad de traer agua del Ebro hacia la capital. La dosis de reproches por la falta de inversiones pasadas que ahora le hubieran ido muy bien a la ciudadanía se la han repartido especialmente el PSC, ERC y Junts, dada su mayor experiencia de gobierno. 

En un tema especialmente sensible para el empresariado como es el absentismo los candidatos no han lucido propuestas especialmente detalladas, remitiéndose todos salvo Albiach en una mayor implicación de las mutuas colaboradoras de la Seguridad Social en el tratamiento de empleados de baja. Donde sí han sido más explícitos y extendidos es en materia de transportes y en la ampliación de el aeropuerto de El Prat. El PSC y el PP han puesto el énfasis en hacer y mejorar las carreteras y ‘comuns’, Junts y ERC en Rodalies.