El Parlamento de Navarra aplaza al lunes la investidura de Chivite para evitar un recurso de la derecha

El pleno de investidura de María Chivite en Navarra será finalmente el lunes y martes de la semana que viene. La Mesa y Junta de portavoces ha acordado finalmente aplazar la cita prevista inicialmente para el sábado y el domingo para evitar un recurso de la derecha. UPN, PP y Vox habían advertido de la posibilidad de presentar un recurso que hacía peligrar el proceso de investidura y retrasarlo todavía más. El portavoz del PSN, Ramón Alzórriz, ha denunciado el "obstruccionismo" de UPN, pero ha advertido que esta actitud no va a poder impedir la investidura de Chivite.

Para evitar complicaciones, la mayoría que sostiene al Gobierno de Chivite ha optado por evitar riesgos y cumplir escrupulosamente los plazos fijados por el reglamento. De esta forma, el debate será el lunes y la primera votación por la tarde. Es necesaria mayoría absoluta que no alcanzará el Gobierno de Chivite por la abstención de EH Bildu. Será por lo tanto necesaria una segunda votación 24 horas después para aprobar el nuevo gobierno por mayoría simple.

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El acto de posesión queda así para el jueves día 17, con una sesión solemne en el Parlamento de Navarra. Un día después tomarán posesión los consejeros y consejeras del nuevo Gabinete. En este caso con un acto institucional en el Palacio de Navarra.

Según recoge el reglamento, el pleno de investidura se tiene que celebrar “tres días después” de que la Mesa y Junta de Portavoces aprueben su convocatoria. Esta ha tenido lugar este jueves por lo que, según el plazo establecido, el pleno tendría que ser el próximo lunes. Y, en caso de no haber mayoría absoluta como parece probable, habrá una segunda votación 24 horas después. Una vez publicado en el BOE, Chivite tomará posesión.

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Pero los socios de Gobierno querían adelantar el proceso unos días, al sábado y el domingo. Porque el 28 de agosto, fecha tope para evitar una repetición electoral está a la vuelta de la esquina y retrasar la investidura puede dificultar un segundo pleno en caso de error en la votación o cambio de opinión de algunos grupos.

Argumentaban que aunque el reglamento fija tres días de plazo también se reconoce al presidente de la Cámara la potestad para reducirlo, algo que ya ha ocurrido otras veces con otro tipo de iniciativas parlamentarias. “Por tratarse de un plazo no previsto en el Amejoramiento, sino en el reglamento, es susceptible de ser reducido por dos vías, por decisión de la Presidencia del Parlamento o por decisión de la Mesa”, defendió este miércoles Hualde.

Pero esta vez hablamos de un pleno de investidura, y eso es ya cosa seria. No hay dudas jurídicas, según los servicios jurídicos del Parlamento, pero UPN amenazaba con recurrir la decisión, empañando la elección de Chivite por una mera formalidad administrativa y poniendo en riesgo el inicio de la legislatura. Y ese es un riesgo que los socios del Gobierno no han querido correr.