Sondeo anual

Las heridas del 'procés' empiezan a cicatrizar: 9 indicadores en las encuestas

ESPECIAL MULTIMEDIA | Las grandes batallas electorales de 2023

Un estudio del ICPS detecta una "normalización" en las tendencias de opinión de los catalanes tras el seísmo de los últimos cinco años

Encuesta sobre la sentencia del 'procés': Los españoles confían en el PSOE para resolver el conflicto catalán

Encuesta sobre la sentencia del 'procés': Los españoles confían en el PSOE para resolver el conflicto catalán

Francisco José Moya
Jose Rico
Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los primeros beneficiados por la derogación del delito de sedición representan el (pen)último episodio de la política de distensión que han impulsado en los últimos años el PSOE desde la Moncloa y ERC desde la Generalitat. Esta estrategia tiene también su impacto en las tendencias de opinión de los catalanes, que han dejado de estar tan polarizadas como en las etapas más convulsas del proceso independentista. Una encuesta del Institut de Ciències Polítiques i Socials (ICPS) de la UAB, elaborada entre octubre y noviembre del año pasado, ha detectado varios indicadores de "normalización" en las opiniones de la ciudadanía respecto a 2017, el momento álgido del 'procés'.

La situación política

Por primera vez en los últimos 20 años, hay más electores que valoran negativamente la situación política de Catalunya (63,4%) que la del conjunto de España (60,7%). La situación política evoluciona de manera diferente en uno y otro contexto. En el conjunto de España, las opiniones negativas muestran una evidente tendencia a la baja desde 2014. En Catalunya se observa un cierto aumento de las opiniones negativas desde 2016, en vísperas del año más agitado del 'procés'.

Discutir sobre política

La tendencia a la "normalización" también se observa en la frecuencia con la que se habla o se discute de política. Los datos de los últimos dos años vuelven a parecerse a los registrados antes de 2011, es decir, antes de la primera Diada multitudinaria, la de 2012, considerada punto de partida del 'procés'. El 56,4% de los catalanes afirman que discuten de política a menudo o alguna vez, frente al 43,6% que lo hace raramente o nunca. En 2013, quienes discutían triplicaban a quienes no discutían.

La valoración del Govern

Las opiniones negativas sobre la gestión del Govern (48%) alcanzan su récord desde 2012. Entonces, las críticas a la Generalitat empezaron a crecer a causa de los recortes sociales por la crisis económica, mejoraron en 2016 y 2017 por el 'procés' y volvieron a caer pasados el 1-O y la DUI. Pero el detalle más significativo es que ese descenso de las valoraciones positivas desde 2017 se debe, principalmente, a los votantes independentistas. Solo el 12% consideran hoy buena o muy buena la gestión del Govern.

Mala imagen de los políticos

El devenir del proceso independentista y la consiguiente polarización de las opiniones explican que desde 2015 se produzca un acusado descenso de la media de valoraciones de los líderes políticos catalanes, que desde 2019 se mueve por debajo del 5. Una tendencia similar afecta a la puntuación media del presidente de la Generalitat, aunque en este caso el suspenso es la nota habitual de todos los 'presidents' desde 2005, salvo excepciones puntuales. En este sondeo, Pere Aragonès obtiene un 4,41 y le superan Jordi Turull (4,54) y Oriol Junqueras (4,84).

Fin del idilio independentista

El dato que mejor demuestra el punto de inflexión del 'procés' es el final de la simpatía mutua entre los dos electorados independentistas. La creciente rivalidad entre ERC y Junts provoca a partir de 2018 una caída sostenida de las valoraciones que los votantes de cada partido hacen de los líderes de la otra formación. Si en 2018 todos se aprobaban entre sí, hoy los electores de JxCat suspenden a Junqueras y Aragonès, y los de Esquerra hacen lo propio con Carles Puigdemont y, sobre todo, con Laura Borràs. Curiosamente, el único que siempre aprobaba en ambos caladeros era Quim Torra.

El 'sí', en mínimos

Por primera vez desde que comenzó el 'procés', en 2012, una encuesta sitúa el porcentaje de apoyo a la independencia por debajo del 40%. El 53,2% de los catalanes votarían 'no' en un hipotético referéndum, mientras que el 39% elegirían la papeleta del 'sí'. En relación a los últimos cinco años, el rechazo a la secesión bate un nuevo récord en este estudio anual y el respaldo a la ruptura con España encaja un nuevo mínimo. En el convulso otoño de 2017, ambos porcentajes se situaron en empate técnico algo por debajo del 50%.

Menos pulsión en ERC y Junts

Ante un eventual referéndum, hay una diferencia muy significativa entre la encuesta de 2018 y la actual: aunque el 'sí' a la independencia sigue siendo ampliamente mayoritario entre los votantes de ERC y Junts, el porcentaje retrocede de forma sostenida, 10 puntos entre los votantes republicanos y 12 puntos entre el electorado posconvergente. Incluso entre los simpatizantes de la CUP se da un descenso de cuatro puntos en el apoyo a la secesión respecto a cuatro años atrás.

Interés en declive

La importancia que los catalanes le dan a la cuestión de la independencia también marca de nuevo un mínimo. Para el 59,8% sigue siendo muy o bastante importante, 20 puntos menos que en 2018. Para el 39,5% es poco o nada importante, 20 puntos más. La diferencia entre ambos porcentajes es la menor en cuatro años. Además, por vez primera, entre los no independentistas son más quienes no dan importancia a este asunto (51,6%) que quienes le dan mucha importancia (47,2%).

¿Abandonar el 'procés'?

Y otro cambio muy relevante: la opción de dar por acabado el 'procés' se duplica en el último año entre los votantes independentistas, del 22% al 43%. La ruptura del Govern entre ERC y Junts explicaría este vuelco, similar a la caída del porcentaje de soberanistas que creen que el 'procés' culminará con la secesión: en 2019 era del 32%; en 2021 pasó al 21%; y ahora se ha desplomado hasta el 9%. En el conjunto de los catalanes, quienes opinan que el 'procés' desembocará en la independencia apenas representan ya el 4%.

Suscríbete para seguir leyendo