Castilla y León

Mañueco ofrece "moderación, tolerancia, integración y espíritu abierto"

El popular toma posesión de su cargo en Valladolid y reivindica la "política de gestión frente a la política de gestos" y una Comunidad "orgullosa" de su pasado

Alfonso Fernández Mañueco toma posesión como presidente de la Junta de Castilla y León.

Vídeo: Agencia ATLAS | Foto: EFE

EFE

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El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (PP), ha ofrecido este martes "moderación, diálogo, tolerancia, integración y un espíritu abierto y constructivo" para "crecer con la diversidad de opiniones y el debate público", durante su discurso de toma de posesión de este cargo, que ha jurado "ahora que toda España observa" a esta Comunidad.

Ante el hemiciclo de las Cortes de Castilla y León, en su primer discurso institucional tras este trámite y justo antes de dar a conocer los integrantes de su nuevo gabinete, Mañueco ha reivindicado la "política de gestión frente a la política de gestos" y una Comunidad "orgullosa" de su pasado, de su "brillante presente" y de un futuro "con dificultades y retos", pero "atractivo para los proyectos de vida de profesionales y personales".

"Ahora que toda España observa a Castilla y León, la vamos a poner de moda", se ha propuesto Mañueco, convencido de que para conseguir ese objetivo es necesario "el trabajo y la colaboración de todos", con "esperanza e ilusión": "Podemos hacer más grande a Castilla y León".

El presidente de la Junta ha preconizado una política como "palanca del cambio social" que responda a las "inquietudes y preocupaciones" de las personas, "sin cámaras, fastos y oropeles", y que sirva para "abrir caminos, señalar objetivos y mover voluntades".

Para Mañueco, la política "debe ser el motor para mover a los pueblos y animar ilusiones, pero siempre con racionalidad, realismo, mesura y prudencia", ya que en esta actividad "no hay redentores ni soluciones milagrosas sino que, como en casi todo, el éxito sólo se consigue con trabajo diario, dedicación constante y resistencia ante las dificultades".

Ha defendido que Castilla y León es "una tierra de oportunidades", frente a quienes "opinan lo contrario", con una "voluntad de futuro" y "capacidad para innovar y avanzar, con ideas y con iniciativas" que la convierten en un lugar "fuerte, ilusionado, competitivo, abierto y próspero".

"Quiero una Castilla y León activa, lejos de los tópicos de pasividad o conservadurismo que injustamente nos atribuyen, una Castilla y León en continuo progreso, con oportunidades, capaz de ofrecer iniciativas, innovación, audacia, inteligencia, talento, originalidad, solidaridad y dinamismo", ha argumentado el presidente quien confía en una Comunidad que sea "ambiciosa", "competitiva", "orgullosa" y firme" en el convencimiento de que tiene posibilidades.

En este sentido, Mañueco ha afirmado que "sólo los pueblos seguros de sí mismos son capaces de ganar su futuro", ha dicho antes de apelar también a la "humildad" y a la ausencia de "indolencia o despreocupación" por los problemas de los ciudadanos, con especial atención a la "solidaridad hacia los más desfavorecidos".

Una Comunidad "con valores, conseguidos con una educación orientada a la excelencia, con el mérito, el respeto, el trabajo y el talento como referentes", y también un territorio en el que "la igualdad de oportunidades no se entienda como una continua equiparación a la baja, sino como la posibilidad de que cada uno labre su destino con su propio esfuerzo, y así se le reconozca sin complejos".

"Creo profundamente en cada una de las personas que conforman nuestra sociedad. En nuestras mujeres, que avanzan decididas a ocupar el protagonismo que merecen; en nuestros jóvenes, que trabajan duro para abrirse camino en un entorno cada vez más exigente; en nuestros mayores, que nos dotan de una impagable experiencia; en nuestros emprendedores; en nuestros agricultores y ganaderos; en nuestros autónomos; en nuestros trabajadores y nuestros servidores públicos, en todos aquellos que han apostado por Castilla y León como proyecto de vida", ha resumido.

"El primero de muchos"

El líder de Vox en Castilla y León y futuro vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ha asegurado este martes que el pacto PP-Vox en esta comunidad es un "primer acuerdo y un ejemplo de los muchos otros que están por venir" entre estas dos formaciones en distintas administraciones.

"Hoy es un gran día para la democracia y para Castilla y León", ha asegurado el próximo vicepresidente de la Junta, que ha avanzado que su Gobierno "devolverá la normalidad legislativa" a la comunidad, "mejorará la atención del campo" y "generará oportunidades en industria".

Por todo ello, García-Gallardo ha asegurado sentirse "satisfecho" con la conformación del Gobierno, aunque ha avanzado que Vox no va a renunciar a uno de los objetivos fundacionales de su formación, como es la derogación del "fallido" Estado de las autonomías.

Finalmente, preguntado por las diferencias que habrá en su labor como vicepresidente sin cartera en contraposición con su predecesor, Francisco Igea, que también era portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, García-Gallardo ha asegurado que esta Consejería de su predecesor se limitó a "repartir subvenciones para asociaciones que fomentan a inmigración irregular".