Iniciativa del PSOE

Una comisión independiente investigará los abusos sexuales de la Iglesia española

El presidente del Gobierno opta por esta vía frente a la del Congreso y señala que los delitos “no pueden quedar impunes”

El Defensor del Pueblo liderará el organismo, integrado por expertos, víctimas y representantes del clero

Pedro Sánchez

Pedro Sánchez / JOSÉ LUIS ROCA

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Frente a la comisión parlamentaria que reclamaban varios grupos de izquierda, Pedro Sánchez ha optado por un organismo independiente para esclarecer los abusos sexuales de la Iglesia española. El presidente del Gobierno quiere que el nuevo ente, integrado por expertos y miembros de distintos colectivos (incluidos tanto las víctimas como el clero), esté liderado por el Defensor del Pueblo. 

La iniciativa, avanzada por el diario ‘El País’, aún debe ser validada por el Congreso. El PSOE registrará este lunes una proposición no de ley, que será votada en las próximas semanas, en la que se encomienda a la institución que dirige Ángel Gabilondo la elaboración de un informe sobre los abusos en la Iglesia católica, con el objetivo de determinar responsabilidades, reparar a los afectados y planificar políticas de prevención y atención de estos casos. 

El pasado martes, el PSOE apoyó la admisión a trámite de una iniciativa de Unidas Podemos, ERC y Bildu para que fuese una comisión parlamentaria la que esclareciese estos delitos, en paralelo a la decisión de la Fiscalía General del Estado de pedir a las fiscalías autonómicas que le envíen todas las denuncias y querellas en tramitación sobre agresiones y abusos sexuales a menores cometidos por religiosos. Pero los socialistas dejaron claro poco después que esa no era la vía que consideraban más idónea, ya que un organismo de este tipo, dentro del Congreso de los Diputados e integrado por los representantes políticos, podría convertirse en “un circo”.

El modelo escogido por Sánchez, que salvo sorpresa será validado por la Cámara baja, es similar al francés, donde un organismo independiente concluyó recientemente que desde 1950 más de 200.000 menores habían sido abusados por cerca de 3.000 religiosos. Pero con una importante diferencia: en el país vecino fue la propia Iglesia la que impulsó esta decisión, una actitud completamente distinta a la de la Conferencia Episcopal Española (CEE), que hasta el momento no ha llevado a cabo ningún paso decidido para esclarecer estos delitos. 

Un “terremoto”

La decisión de Sánchez fue bien recibida por una de las víctimas, el escritor barcelonés Alejandro Palomas, con quien el presidente del Gobierno se reunió el pasado jueves. “¡Lo conseguimos! El jueves salí de la Moncloa con una promesa. Hoy, 64 horas más tarde, amanezco con lo prometido. El eco de muchas voces pequeñas es, sumadas todas, un terremoto. No lo olvidemos. Hoy es un gran día”, escribió Palomas en Twitter. 

El propio Sánchez le contestó en la misma red social. "Las víctimas no pueden seguir silenciadas –selañó-. Es hora de reparar vuestro dolor y evitar que vuelva a suceder. Con el compromiso de que los abusos cometidos en el seno de la Iglesia no queden impunes".