Belarra plantea que los cargos de Podemos no dimitan si son procesados por "acoso judicial"

Ione Belarra, previsiblemente la sucesora de Pablo Iglesias al frente de Podemos, ha planteado que aquellas personas que ocupen un cargo -ya sea público o dentro de la formación- no tenga que dimitir al ser procesados o condenados "cuando exista un contexto de acoso judicial con intenciones políticas". Lo mismo propone respecto a hacer uso del aforamiento. Hasta el momento, todos los miembros del partido morado morados que se vieran en esta situación estaban obligados a abandonar sus cargos y no podían recurrir a ningún "privilegio jurídico".

A dos semanas de que se celebre 'Vistalegre IV', donde la militancia escogerá a la futura secretaria general de Podemos, el Documento Ético presentado por Belarra para liderar el partido ha generado cierto revuelo. Los estatutos actuales recogen "el compromiso de renuncia al cargo público, al cargo interno o a cualquier candidatura a dichos cargos en caso de ser procesado o condenado" y "la renuncia a cualquier privilegio jurídico o material derivado de forma directa de su condición y al acogimiento a cualquier figura de aforamiento judicial".

No obstante, la también ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 ha incluido una coletilla final: "Con las matizaciones necesarias cuando exista un contexto de acoso judicial con intenciones políticas (lawfare) y alejado del derecho". De esta forma abre la puerta a evitar que los dirigentes de la formación tengan que dimitir bajo el pretexto de que están siendo objeto de una persecución judicial. El planteamiento va en la línea que ha esgrimido el partido desde su nacimiento de estar en el punto de mira de las llamadas 'cloacas del Estado' y de sus brazos judiciales.

El primer caso

La publicación de este documento dentro del proceso para renovar la secretaría general de Podemos coincidió con la decisión del Tribunal Supremo abrir juicio oral al secretario de Organización del partido, Alberto Rodríguez, por un delito de atentado a agentes de la autoridad y lesiones leves, en los que habría incurrido al dar presuntamente una patada a un policía en una protesta de 2014 en La Laguna (Tenerife).

Tras conocerse la decisión, fuentes del partido morado denunciaron estar "ante una estrategia más de criminalización de las personas que se manifiestan para defender derechos" y criticaron que la apertura del juicio oral se produce "sin ni una sola prueba". "Se trata de un claro montaje", defendieron. En este sentido, todo apunta a que Rodríguez podría ser uno de los primeros beneficiados de este cambio en los estatutos si Belarra sale elegida secretaria general del partido el próximo domingo 13 de junio.