La lacra de la corrupción

El inspector de la 'Gürtel' relata cómo el PP blanqueó dinero fraccionándolo

Los investigadores de la caja b del PP consideran que el partido utilizó el "proceso habitual" para aflorar dinero negro

Los expertos recuerdan la sentencia de la primera época de la Gürtel y defienden la veracidad de los 'papeles' de Bárcenas

Manuel Morocho.

Manuel Morocho. / Archivo

Ángeles Vázquez

Ángeles Vázquez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El inspector jefe de la UDEF a cargo del 'caso Gürtel' y la caja b del PP, Manuel Morocho, ha sido el protagonista de la sesión de este miércoles del juicio en el que se determinará si el partido que preside Pablo Casado pagó en b parte de la reforma de su sede central. Ante el tribunal el equipo de investigadores que participó en las pesquisas ha explicado cómo contrastó la contabilidad manuscrita seguida por el extesorero del PP Luis Bárcenas y los ingresos declarados oficialmente, lo que le permite concluir que el PP fue dando "legalidad" al dinero negro obtenido en donaciones en efectivo ingresándolo en sus cuentas de forma fraccionada para cumplir con el límite legal establecido y dar apariencia de legalidad.

A la pregunta de la acusación que ejercen los socialistas valencianos relativa a si pone en duda la "contabilidad extracontable" seguida por Bárcenas, Morocho explicó que se trata de un "proceso muy normal", "habitual cuando alguien tiene fondos opacos" para lograr aflorar de una manera u otra en una cuenta bancaria". El fraccionamiento responde a que la ley de financiación de partidos políticos fijaba hasta 2007 el límite legal de las donaciones en efectivo a un partido en 60.000 euros anuales. Así se "dotaba de apariencia de legalidad a esas entradas de fondos. El efectivo que llega a la sede nacional se transforma en ingresos fraccionados en cuentas de donativos y de funcionamiento", explicó.

El jefe de la unidad de investigación quiso recordar que la sentencia de la primera época de la 'Gürtel' ya había considerado acreditada la existencia de una caja b en el PP y que él se acomodaba a esa terminología para explicar la metodología con la que encontró interrelaciones entre los apuntes de Bárcenas y ciertos gastos legales, como la adquisición de unos locales en La Rioja y en Bilbao para el partido.

Contabilidad "rudimentaria"

Frente a la abogada del PP, que ha intentado desmontar la credibilidad de los 'papeles de Bárcenas', Morocho ha defendido que el extesorero del PP elaboró una contabilidad "rudimentaria" para controlar los donativos que llegaban por fuera del cauce legal. Por ello, encuentra "explicable" que contengan algún "descuadre" o "error", como la omisión de algún apuntes que sí aparecen en otros documentos en distinto soporte material que recogían la contabilidad b, informa Europa Press. En cualquier caso, sus anotaciones tienen "coherencia" y demuestran que tanto las cantidades apuntadas como las que no aparecen siguieron la "misma rutina" de ingreso en cuentas bancarias del partido.

A esa conclusión llegaron, y así lo plasmó la UDEF en dos informes, al comprobar que en 2007 Bárcenas --entonces gerente del PP-- apuntó una salida de la caja b que después se ingresó el extesorero Álvaro Lapuerta mediante talón en la cuenta de donativos nominativos. También, en otras coincidencias de "14 de salidas de la contabilidad objeto de análisis con la cuenta de donativos anónimos", apostilló Morocho, que agregó que estos ingresos fueron todos en efectivos salvo el mencionado talón.

Otro agente de la UDEF explicó que existen "dos indicios" pero no pruebas concluyentes de que parte de la fortuna que Bárcenas tenía en Suiza podía proceder de la caja b del PP. Detalló que el primero fue la apertura en 1991 de una cuenta denominada 'Iglesia' en un banco helvético, justo un año después de que Rosendo Naseiro le entregara 8 millones de pesetas y le diera el relevo de la contabilidad b, justo el mismo mes en que fue detenido. El otro surge del análisis de las cuentas de la 'Gürtel', de las que Bárcenas recibgió más de 950.000 euros en comisiones.