Juicio al 'procés'

La 'exconsellera' Serret se entrega en el Supremo y descoloca a Waterloo

Cruzó la frontera en coche por Euskadi y casi nadie conocía su decisión de volver

La pena prevista para el delito de desobediencia que se le imputa es multa e inhabilitación de hasta dos años

Este viernes tomará posesión de su acta de diputada en el Parlament

Meritxell Serret en el Tribunal Supremo. FOTO: JOSÉ LUIS ROCA

Meritxell Serret en el Tribunal Supremo. FOTO: JOSÉ LUIS ROCA / José Luis Roca

Xabi Barrena
Ángeles Vázquez
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Meritxell Serret volvió este jueves por sorpresa a Catalunya. La ‘exconsellera’ de Agricultura, que viajó a Bélgica junto a otros ‘exconselleres’ y el ‘expresident’ Carles Puigdemont tras la declaración de independencia de 2017, compareció voluntariamente ante el Tribunal Supremo acompañada de su abogado, Iñigo Iruin. El juez Pablo Llarena, que instruyó la causa abierta contra el 'procés' y mantiene la relativa a los residentes en el extranjero, la ha dejado en libertad con las únicas medidas cautelares de designar un domicilio y comparecer siempre que sea llamada. Su próxima cita judicial será el 8 de abril, cuando declare ante el magistrado.

Serret comunicó a muy pocas personas sus intenciones: su propia familia las conoció este jueves a las 10 de la mañana, cuando ya estaba en Madrid. Hasta ayer mismo ni Puigdemont ni el 'exconseller' Lluís Puig -que se declaró "muy sorprendido- conocían que iba a cruzar la frontera para comparecer ante el Supremo. Su decisión, que le permitirá asistir como diputada electa a la sesión constitutiva del Parlament de este viernes, establece una línea divisoria entre ella y quienes han decidido permanecer en el extranjero, como Toni Comín y Clara Ponsatí, además de Puig y el 'expresident'.

Documentos de identidad caducados

La 'exconsellera' de Agricultura, cuyos documentos de identidad están caducados, entró a España a través de Euskadi, por la frontera de Irun, en coche. Había previsto incluso un operativo para esquivar un eventual seguimiento policial, aunque fuentes de ERC subrayan que no era tan aparatoso como el que utilizó Puigdemont en 2017. Tras comparecer ante el juez, se trasladó a Catalunya y llegó poco después de las 18.00 horas a su pueblo, Vallfogona de Balaguer, donde muchos vecinos la esperaban para darle la bienvenida.

Pese a encontrarse en rebeldía, al no comparecer ante la justicia española, Serret fue procesada por el juez Pablo Llarena junto al resto de líderes responsables del 1-O, tanto los 'huidos' como los que acabaron siendo condenados por el alto tribunal. En su caso, se le atribuían los delitos de malversación de caudales públicos y desobediencia, pero previsiblemente su condena habría quedado reducida únicamente a este último de no haber partido, porque fue la que se impuso los ‘exconselleres’ Meritxell Borràs, Carles Mundó y Santi Vila, tras el juicio del 'procés'. Esa sentencia ha influido decisivamente en la vuelta de Serret.

Ahora todo apunta a que Serret el alto tribunal terminará remitiendo las actuaciones al Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, que sería el tribunal que además le correspondería de acuerdo con su fuero como diputada del 'Parlament'.

Regularizar su situación

Tras comparecer ante la secretaría de la Sala Segunda Serret dijo estar "feliz y contenta" de "haber dado el paso" de regularizar su situación ante la justicia, al considerar que es lo coherente para "defender el proyecto de república catalana" desde el Parlament y "acabar con esta represión judicial al 1-O". El delito por el que está procesada solo está penado con multa e inhabilitación para empleo o cargo público de hasta dos años.

A diferencia de lo ocurrido con sus compañeros aun en Bélgica, el magistrado nunca llegó a cursar una euroorden contra Serret tras la sentencia del 14 de octubre de 2019, aunque mantenía contra ella una orden nacional de detención para tomarle declaración y continuar el procedimiento contra ella.

Serret, arropada tras su declaración por diputados de ERC, JxCat y la CUP, había renunciado hace unos días a su puesto como delegada del Govern ante de la Unión Europea.