Debate entre expresidentes

Aznar cree que la mesa de diálogo es "devastadora" y González la tilda de "performance"

Felipe González y Jose María Aznar

Felipe González y Jose María Aznar / periodico

Juan José Fernández

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Felipe González hará campaña contra cualquier modificación de la Constitución que incluya darle espacio al derecho de autodeterminación. Es una advertencia que ha hecho el expresidente socialista este jueves durante una charla que ha mantenido con el también expresidente José María Aznar en la apertura del I Congreso Nacional de la Sociedad Civil, que se celebra en Madrid.

González ha tildado a la mesa de diálogo entre el Gobierno de España y la Generalitat catalana de "performance de cara a las elecciones catalanas. Todo el mundo sabe que no hay un espacio para la amnistía y no hay un espacio para la autodeterminación. Y si alguien quiere reformar la Constitución para eso, yo haré campaña en contra", ha dicho.

Antes, se había referido también al encuentro de Moncloa encabezado por Pedro Sánchez y Quim Torra haciendo otra advertencia: "El ámbito de la Constitución y el ordenamiento jurídico es el ámbito en el que puede y debe hablar un representante político. Si alguien rompe o pretende romper el perímetro de la Constitución y el ordenamiento jurídico, invitará a que otro lo rompa por otra parte. Y entraremos en la dinámica inestable de otras épocas de la historia de España".

La trascendencia de la mesa de diálogo ha sido el único gran disenso en la conversación entre ambos presidentes. Para Felipe González "ayer hubo una reunión en la que no pasó nada. Y en la siguiente seguirá no pasando nada". Para José María Aznar tuvo otro significado mucho peor:  "El pacto de lealtad a la Constitución ha sido roto, y eso tiene sus responsables -ha sentenciado-. Lo que pasó ayer tiene muy graves consecuencias. El solo hecho de la reunión es un elemento devastador para el sistema constitucional español".

González ha vuelto a quitarle hierro a la mesa recordando otro diálogo pasado sobre Catalunya. "En 2014, una parte de los puntos que hoy se pretende que sean materia de diálogo estaban sobre la mesa del señor Rajoy y el señor Mas, y había en ellos una excentricidad constitucional".

Código Penal

Ambos expresidentes han hablado en el Casino de Madrid, ante un público mayoritariamente conservador, con muchos lectores de Pérez Reverte y no pocos oyentes de Jiménez Losantos. En una de las salas del Congreso se desplegó una exposición de banderas de España, incluida una cruz de Borgoña de los tercios, un estandarte de la Legión y una bandera de la Infantería de la II República.

En el evento, que se celebra bajo el lema "Repensar España" y ha sido organizado por la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora, que preside el economista y académico Aldo Olcese, Aznar y González se han referido a una posible reforma del Código Penal en torno a los delitos de rebelión y sedición. Para González, "si se reforma el Código Penal, tiene que garantizar con mayor claridad política el precio a pagar por la deslealtad institucional".

Como ciudadano -"No represento más que a mí mismo", ha aclarado al comienzo del acto-, el hombre que gobernó España entre 1982 y 1996 propondría "que se penalice políticamente en serio la deslealtad", ha dicho, antes de considerar que "tenemos un Código Penal cuya tipificación de la rebelión y la sedición no se corresponde con las situaciones que se producen" y añadir que "reformarlo ahora es tan necesario como inoportuno".

Aznar ha remachado entonces que "la deslealtad tiene que tener un precio. Uno no puede pretender romper la mesa y que la responsabilidad la paguen los ciudadanos".

Descentralización y lealtad

Cuando González hablaba sobre la mesa de diálogo, Aznar le ha interrumpido con una breve pero directa alusión: "Tú no lo harías, y yo tampoco", respondida así por el aludido: "Son situaciones diferentes".

En el encuentro, moderado por el presidente del Real Instituto Elcano, Emilio Lamo de Espinosa, y que los organizadores se plantearon titular "debate de la concordia", ambos expresidentes  han compartido un tono crítico sobre el estado actual de la relación entre el centro y las periferias de la España democrática. Sobre todo Aznar:  "Una relación bilateral entre una comunidad y el Gobierno de España y que ese diálogo se produzca entre iguales choca con la idea de los constituyentes", ha dicho, para refrendar su impresión de que el pacto del 78 "no se ha roto: ha sido roto".

González ha descrito una desnaturalización de la descentralización que abarca el pacto constitucional del 78: "Durante un tiempo, la descentralización política se entendía como una  descentralización leal -ha dicho-. La representación del Gobierno de Catalunya no negociaba con el Estado, era representante del Estado. En algún momento, la descentralización empieza a confundirse con centrífugación del poder, y por tanto deshilachamiento  de la ciudadanía".

"Me siento angustiado como ciudadano español -ha argumentado Aznar-. No me gusta nada lo que estoy viendo". Entre otras cosas, "que se dé las llaves de la gobernabilidad a alguien que está preso por sedición". El presidente que gobernó España entre 1996 y 2004 ha recordado una de sus frases: "De la España del futuro, lo que más me preocupa es que nos cansemos de ser normales", y ha añadido una parábola: "No se puede volver a tirar los dados, porque pueden no caer bien".

Felipe González también ha empleado metáforas. En su opinión, el modelo de consenso español que había regido desde 1978 "parece que se acabó en 2015, con un parlamento a la italiana, pero sin italianos". No obstante, ha expresado una confianza en el futuro de España como país: "La resiliencia de España es mucho mayor de lo que muchos imaginan. Esto va a salir adelante por mucho que muchos se empeñen en que no salga adelante". 

Sociedad en congreso

 La reunión que se celebra en Madrid concitará hasta este viernes a 120 ponentes en 19 mesas de discusión sobre temas como la familia, la sociedad civil, el fortalecimiento de España como nación o la democracia constitucional, términos todos ellos que dan títulos a sesiones de debate.

Parte el congreso con el que se presenta la ASOCIA (Asociación Sociedad Civil Ahora) de una preocupación sobre el estado actual de la política en España. Algo que Felipe González ha suscrito: "A los políticos no se les oye hablar, porque tienen el cuchillo en la boca. Para hablar, hay que quitarse el cuchillo de la boca". 

Aznar ha lamentado que "en el mundo de hoy, la democracia liberal está bajo amenaza", y en España "los elementos básicos que han guiado nuestra vida desde 1978 han quedado quebrados".

Ahora, como en las últimas ocasiones en que han coincidido, Aznar y González no han exhibido una mala relación ni las enconadas diferencias que caracterizaron su relación cuando estaban en la política activa.

La apertura del Congreso, en el Casino de Madrid, se ha llevado a cabo con una intervención del alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, para quien "eso de desjudicializar la política es el pretexto y el instrumento para socavar el Estado de Derecho". Este viernes cerrará el congreso la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.

Entre los llamados a reflexionar sobre el presente y futuro de España, Félix Sanz Roldán, Juan Costa, Antonio Garrigues, Consuelo Madrigal, Jordi Sevilla, Victoria Prego, Gabriel Albiac, Trinidad Jiménez, Rosa Díez, Victoria Ortega, Nicolas Redondo Terreros, Teresa Freixas, Manuel Pimentel, Jaime Mayor Oreja e Inocencio Arias.