FIN DE LA PROTESTA

Los presos independentistas dejan la huelga de hambre

Sànchez, Turull, Rull y Forn finalizan su huelga de hambre

Los cuatro presos independentistas en huelga de hambre finalizan hoy su acción de protesta. / periodico

Júlia Regué

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Punto y final a la huelga de hambre. Tras 20 días sin injerir alimentos -en el caso de Jordi Sànchez y Jordi Turull, y 17 días en el de Josep Rull y Joaquim Forn- los presos de Junts per Catalunya decidieron abandonar este jueves su protesta en la cárcel de Lledoners. Consideran que sus reivindicaciones han sido ganadas: la "concienciación" sobre su situación procesal, la "visualización" de sus reclamos y la "apertura del cajón" del Tribunal Constitucional (TC) en el que reposaban sus recursos de amparo. Una decisión que se apresuró horas después de la petición del 'president' Quim Torra, de cuatro expresidentes de la Generalitat y el Parlament, y del Síndic de Greuges, pidiendo que la abandonasen.

Y es que el Alto Tribunal ya se ha puesto manos a la obra para estudiar y resolver las demandas que los encarcelados veían "bloqueadas". Una "inacción" que les impedía llevar el caso a instancias europeas, a su cima: el Tribunal Europeo de los Derechos Humanos. Ayer mismo el TC comunicó a Sànchez un nuevo rechazo a su excarcelación por unanimidad, algo de lo que se sirvió la portavoz de los huelguistas, Pilar Calvo, para aseverar que su protesta ha fructificado. "Esta es la prueba [...] No es casualidad que después de 300 días de silencio, dos días después de iniciar la huelga, en el TC hayan reaccionado detallando un calendario y como iría el estado de los recursos", espetó en una rueda de prensa celebrada en el Col·legi de Periodistes.

En una misiva a la que puso voz su representante, agradecieron los apoyos recibidos y celebraron el compromiso del tribunal de estudiar sus demandas "mensualmente" y "sin interrupción".

Traslado al hospital

Los cuatro fueron trasladados a la Unidad Hospitalaria Penitenciaria de Terrassa para seguir bajo un estricto control médico en la vuelta progresiva a la alimentación. Ingresaron en habitaciones individuales, y permanecerán en el hospital hasta que "criterios médicos" lo requieran. Según fuentes de los servicios penitenciarios, las visitas de autoridades "quedarán muy restringidas", aunque recuerdan que el régimen les da derecho a dos comunicaciones de 30 minutos a la semana. Hasta ahora, Turull era el único de los reclusos en huelga de hambre que había tenido que ser trasladado a la enfermería del centro penitenciario de Lledoners, el viernes pasado, al haberse deteriorado su estado de salud. El resto seguía en sus respectivos módulos. 

Según Calvo, todos ellos han perdido entre un 10% y un 11% de su peso corporal y deberán comenzar con una alimentación líquida antes de poder ingerir sólidos. "Tendrán que someterse a un control muy estricto para ver cómo se recuperan poco a poco", añadió.

Llamamiento a la no violencia

Sànchez, Turull, Rull y Forn insistieron en su escrito en desvincular el fin de la huelga de hambre de la celebración del Consejo de Ministros en Barcelona -y del cóctel de movilizaciones previstas-. Hurgó en ello su portavoz, y aseveró que "en un día delicado, lo único que esperan es una actitud no violenta, pacífica y con la cara destapada".