CONSEJO DE MINISTROS

El Gobierno advierte de que actuará si el Parlament vulnera la Constitución

Pedro Sanchez preside uno de los últimos Consejo de Ministros del año que ha terminado

Pedro Sanchez preside uno de los últimos Consejo de Ministros del año que ha terminado / JOSÉ LUIS ROCA

Iolanda Mármol

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El Gobierno está dispuesto a tener “toda la paciencia” con la crisis en Catalunya pero, a su vez, necesita enviar mensajes de firmeza, máxime con los partidos del ala derecha llamando tibio a Pedro Sánchez y exigiéndole mano dura como una gota malaya. En ese sofisticado equilibrio, tras una semana de tensión exasperante, la Moncloa invita a los partidos independentistas a pactar en Madrid los Presupuestos Generales para el 2019 mientras les advierte de que “actuará” si se saltan la Constitución con acuerdos en el Parlament.

El Ejecutivo esperará hasta el próximo martes, para ver si la Mesa de la Cámara catalana ratifica el acuerdo al que llegaron este jueves ERC y JxCat para intentar sortear la suspensión dictada por el Tribunal Supremo contra los diputados procesados. Si no se reconsidera la decisión, el Gobierno moverá ficha.

¿Cómo? La ministra portavoz, Isabel Celaá, sobrevoló con respuestas abiertas a la interpretación. “Entre el 155 perpetuo y la quiebra hay un espacio amplio para acordar”, deslizó. En la ambigüedad, flota la amenaza de volver a la vía judicial (que Sánchez dijo haber abandonado) presentando un recurso al Tribunal Constitucional. No sería plato de gusto del Ejecutivo, pero tampoco puede permitirse el desgaste de parecer condescendiente mientras Ciudadanos gana votos a expuertas convertiéndose en refugio del unionismo indignado catalán al pedir más madera contra el procesismo.

Posiciones numantinas

El Gobierno gana en todo caso unos días. Mira de reojo la alianza forzosa a la que las dos fuerzas independentistas llegaron el jueves: JxCat registraría cuatro documentos, uno por cada uno de sus diputados suspendidos (Carles Puigdemont, Josep Rull, Jordi Turull, y Jordi Sànchez) en los que hagan constar que delegan sus votos al portavoz de su grupo, Albert Batet. Es una forma de sortear la decisión del juez del Supremo Pablo Llarena, que exige que designen a un sustituto, algo que sí han hecho los dos diputados de ERC afectados (Oriol Junqueras y Raül Romeva). La fórmula no convence a los letrados. Tampoco a PSC y Cs, que piden a la Mesa que reconsidere este acuerdo.

Si el martes, cuando se reúna el máximo órgano del Parlament, valida el driblaje, el Ejecutivo actuará. “Si el Parlament adopta decisiones contrarias a la Constitución, el Gobierno actuará en consecuencia”, señaló la portavoz. Hizo también un llamamiento a Torra, para que abandone una posición “numantina” que “colapsa” al Govern y “bloquea” al Parlament.

El equipo ministerial lleva semanas pidiendo a Torra que rebaje la inflamación dialéctica. Nadie ha explicado en Madrid si Sánchez y el 'president' han hablado en los últimos días y tampoco si el Gobierno ha contactado con Puigdemont, con Junqueras o con Elsa Artadi. "El Gobierno mantiene la interlocución con el Gobierno de Catalunya", es todo cuanto confirmó Celaá.

La llave de las Cuentas

Con la parte más sustantiva del mapa sin desvelar, Sánchez mantiene su mantra en público: dice querer aprobar los Presupuestos y terminar la legislatura, dos objetivos para los que necesita a los partidos independentistas en el Congreso. En su discurso de resistencia (realista o no, creíble o no) el Gobierno volvió a tender la mano este viernes a PDECat y ERC para negociar las Cuentas en Madrid.

Hasta donde han reconocido sus principales actores en conversaciones informales, las negociaciones avanzaron antes del 1-O. Tras el ultimátum de Torra, amenazando a Sánchez con no apoyar los Presupuestos, el diputado republicano Gabriel Rufián reivindicó la autonomía de su grupo parlamentario.

En el PDECat preparan una semana intensa en el Congreso. El portavoz, Carles Campuzano, preguntará a Sánchez en la sesión de control cómo piensa encauzar democráticamente el conflicto, y le interpelará sobre la política de inversiones en Catalunya. Gestos y financiación, cuentan en Madrid dirigentes de ERC y PDECat, son la llave para el Presupuesto.