la izquierda alternativa

Un año 'en comú'

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Roger Pascual

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Este domingo se cumple un año del nacimiento de Catalunya en Comú. Por entonces, aupados por la doble victoria de Xavier Domènech en las elecciones generales en Catalunya, la recién nacida confluencia soñaba con ser la alternativa de país a la hegemonía convergente. En el tiempo en que la Tierra ha tardado en dar una vuelta entera alrededor del Sol muchas cosas han cambiado en la galaxia Colau. Podem, que se resistía a entrar en la órbita gravitacional de la confluencia, está más cerca que nunca de confluir, mientras que el sueño de ser el nuevo Sol del universo catalán parece más lejano. ¿Estrella fugaz o nuevo planeta en expansión? El tiempo lo dirá, empezando por las municipales del año que viene.

"Es evidente que el resultado en esos comicios será relevante, pero no creo que marque nuestro futuro. Este es un partido nuevo, con voluntad de permanencia y crecimiento", señala Marc Parés. Tanto él como Elisenda Alamany entraron hace un año en la coordinadora de la confluencia como independientes. No provenían de ninguno de los partidos que integraban la nueva formación (ICVEUiA y Barcelona en Comú). Ella es hoy la portavoz de los 'comuns' en el Parlament y él es el coordinador de análisis, políticas públicas y programa.

A nivel interno, los ‘comuns’ nacieron cojos de una pata, Podem, que se salió en el último momento de la confluencia ante las reticencias de su entonces líder, Albano Dante Fachin. Tras su marcha, la gestora, con Jéssica Albiach (miembro de la ejecutiva de los 'comuns') al frente, calmó la situación, posibilitando ir a las elecciones del 21-D en coalición con los 'comuns'. Domènech podría culminar la conjunción de los dos astros si gana las primarias de Podem que terminan este lunes y se convierte, a la vez, en líder de los morados y de los ‘comuns’. "La asignatura pendiente de la asamblea fundacional fue que Podem y ‘comuns’ fuéramos de la mano; en un proyecto con vocación de mayorías no se explica que cada uno vaya por su lado", valora Alamany. 

Foco de tensiones

La relación con Podem ha sido foco de tensiones en este año atribulado igual que el hecho de no haber tenido voz propia en el Parlament, donde la convulsa coalición de Catalunya Sí que es Pot (en la que no estaba Barcelona en Comú) tuvo que gestionar el 1-O y sus consecuencias. Las dos grandes decisiones que han tomado los ‘comuns’ han sido participar en el referéndum ilegal y romper con el PSC. Tanto Parés como Alamany hacen una lectura positiva a medio y largo plazo de ambas decisiones, aunque a corto les hayan podido pasar factura.

"Nos penalizó electoralmente no situarnos en ninguno de los dos bloques, pero nos deja en mejor situación para ser la fuerza de futuro que pueda liderar un proyecto que logre consensos de JxCat al PSC", considera Alamany. "“Fuimos al 21-D con el espacio todavía en construcción", reflexiona Parés, que cree que la asamblea del día 22 será muy importante para definir la organización territorial.

Aunque algunos sectores federalistas reclaman que esta cita sirva para marcar más claramente distancias con el independentismo, la dirección de los ‘comuns’ señala que este encuentro tiene que servir para desplegar las raíces territoriales y preparar el camino de las municipales. "Esta asamblea organizativa tiene que permitir que arraigue el proyecto en el territorio, consolidar un partido nuevo para nueva época", apunta Alamany. El despliegue territorial, fuera de la Barcelona 'colauista', es el gran caballo de batalla. ICV ya ha puesto en valor su fuerza territorial, aunque Parés arguye que los ‘comuns’ tienen que ir mucho más allá. "El despliegue municipal es clave. La construcción del espacio municipal tiene que superar la suma de las partes. Todo el mundo es importante, pero tenemos que ir mas allá y abrirnos", reflexiona.

Alamany está convencida de que las municipales, que marcaron el despertar de su movimiento con el triunfo de Ada Colau en Barcelona, serán claves para la construcción de la identidad ‘comuna’. "Muchas veces se mira la política municipal como la hermanita pobre de la política y para nosotros es donde arraiga de verdad el cambio".