Un Govern con muchas caras nuevas

A falta de cerrar los flecos pendientes de la negociación, que afectan principalmente al área de comunicación, Junts per Catalunya y ERC están perfilando un Govern que tendrá muchas caras nuevas. A estas alturas de las conversaciones solo dos miembros del anterior Ejecutivo parecen tener una silla garantizada en el nuevo: Jordi Turull y Josep Rull.

Superada la interrupción de las negociaciones del pasado jueves, varias fuentes dan por muy probable un acuerdo la semana que viene. Y todo apunta a que la "restitución" que se habían marcado como objetivo los independentistas no será completa; de hecho, solo los dos pesos pesados del PDECat tienen un puesto seguro, con casi toda probabilidad en las mismas 'conselleries' que ocuparon en la anterior legislatura. Así, Turull sería el titular de Presidència, y Rull de Territori i Sostenibilitat.

La opción más probable en estos momentos es que el Parlament intente investir en primera instancia a Jordi Sànchez, preso en Soto del Real. Los independentistas tratarían así de dar visibilidad a la situación política en Catalunya, con dirigentes encarcelados y otros desplazados al extranjero. Carles Puigdemont permanecería en Bruselas, al frente de una estructura paralela a la catalana financiada con fondos privados para no provocar nuevos problemas legales a quienes se han quedado en Catalunya.

Fuentes conocedoras de las negociaciones dan por segura también la entrada de Elsa Artadi (en el Departament d’Empresa) y de Marc Solsona, el pujante alcalde de Mollerussa, que podría quedarse con Governació.

Interior sigue siendo la patata caliente de un Ejecutivo que, por la parte de los nombres que proponga ERC, está más abierto a especulaciones.