Así se retractó el exjuez Santi Vidal de las irregularidades que atribuyó al Govern

"Trasladé en ese momento una realidad inexistente, trasladé como un hecho una situación especulativa". De esta manera se retractó el pasado miércoles el exjuez y exsenador de ERC Santi Vidal de las manifestaciones que hizo en diversas conferencias en el 2016, según las cuales el Govern había conseguido los datos fiscales de los catalanes de forma "ilegal" para elaborar el censo electoral del referéndum unilateral y había una partida secreta para crear las estructuras de Estado en una eventual república catalana. En el vídeo del interrogatorio, al que ha accedido ese diario, el exmagistrado admitió que lo que dijo "no era cierto". De hecho señaló que su error había sido gramatical, al haber hablado en "presente indicativo cuando tendría que haberlo hecho en futuro condicional".

 "Presenté mi dimisión porque fui consciente de manifestaciones que no había contrastado, que no puedo de ninguna de las maneras decir que fueran ciertas, y que excedían el ámbito de mis competencias", explicó Vidal. El entonces senador republicano renunció al puesto en la Cámara alta el 27 de enero del 2017 tras hacerse públicas sus palabras en las conferencias. Sus controvertidas afirmaciones permitieron a Vox presentar una denuncia y al juez Juan Antonio Ramírez abrir la investigación por los preparativos del 1-O y la creación de las estructuras de Estado. El exmagistrado solo contestó a las preguntas de su abogada, Olga Tubau, porque, a su entender, el juez no le había concretado los motivos de su imputación.

El exsenador atribuyó sus polémicas palabras al contexto de actos políticos y comentó que algunas de las afirmaciones las había sacado de especulaciones que aseguró haber leído en medios de comunicación. "Un mitin político no es una declaración judicial, donde hay que ser muy cuidadoso y medir muy bien las palabras que se dicen". Entre otras cosas, negó que tuviera conocimiento de ningún preacuerdo con la OTAN, con dos fondos internacionales que garantizarían una línea de crédito de 200.000 millones, de los nombres de los 300 jueces españoles dispuestos a seguir trabajando en una Catalunya independiente, de que los Mossos estuvieran recibiendo asesoramiento en contraespionaje de un Estado no europeo y que estuviera buscando a agentes del CNI infiltrados en el cuerpo.

Además de negar todas aquellas polémicas revelaciones, Vidal aseguró no tener ninguna relación con 'EnfoCats', el documento incautado en el domicilio de Josep María Jové, secretario general de la vicepresidencia económica de Catalunya, que la Guardia Civil considera la hoja de ruta del Govern para la secesión. Carles Viver Pi-Sunyer, que declaró después de Vidal, también negó relación alguna con ese documento. El exmagistrado del Tribunal Constitucional y expresidente del Consell Assesor per a la Transició Nacional explicó que solo era "puramente asesor" del Govern. "Nunca tuve capacidad de decisión jurídica ni política (...). Es una leyenda que se ha creado en los medios que no se corresponde a la realidad".