La declaración de Francisco Correa en el juicio del 'caso Gürtel', en directo

Correa explica que echó a Isabel Jordán, una empleada suya, porque se apropió indebidamente de dinero de la empresa.

Correa niega que José Luis Peñas le ofreciera dinero a cambio de no divulgar las conversaciones que le grabó. "Hay que tener muchísima maldad y algo que no sé cómo se puede llamar, que alguien que está viviendo en tu casa durante dos años, mi hija de 4 años paseando con él y llamándole tío Pepe, y luego te traiciona y te graba", afirma en relación a Peñas. Añade que un día, paseando con su hija, le dijo a Peñas: "Fíjate cómo me estoy portando con vosotros (con él y con Juan José Moreno), os estoy pagando cada mes 3.500 euros para que podáis vivir (cuando les expulsaron del PP), en verano y navidad 7.000 euros, os he montado una oficina en Majadahonda, os pago todos los gastos de esa oficina, os he puesto un jefe de prensa para que podáis sacar adelante un partido, el día que yo os deje de pagar me harás daño, me denunciarás cosas que tú sabes de mí. Él se puso a llorar, "cómo te voy a traicionar, soy como tu hermano", le dijo.

"Me importa un rábano que me estén escuchando, ni he matado nadie ni soy el socio de Bin Laden", asegura Correa que manifestó cuando se enteró de que la justicia estaba sobre sus pasos.

Reconoce que tuvo relación con Juan Pérez Mora. Explica que le conoció porque ambos eras seguidores del Atlético de Madrid. "Me dice que es juez y que estuvo en el juzgado número 5 y que precedió a Garzón. Dice que nos va a ayudar hablando con varias personas y que tenía control aquí o allí, yo estaba inquieto por los registros. Luego resulta que no era juez, que era vendedor de libros".

Correa habla de los despachos de sus asesores, que fueron registrados. También explica que quiso regularizar el dinero en el extranjero, pero que su asesor le dijo que no por sus otros clientes. "El error que tú has cometido es que no tienes la residencia fuera de España", dice que le dijo su asesor Ramón Blanco Balín.

Se retoma la declaración de Correa.

El presidente del tribunal ordena un receso de 15 minutos.

Correa explica que él era quien daba autorización para retirar dinero de la caja b, incluso en el caso de su entonces mujer. "Me lo pedía Izquierdo y yo lo autorizaba".

"Las entregas económicas, en efectivo en dinero, nadie en mi empresa las hacía. Solo yo. La relación directa con los políticos siempre la he tenido yo". Asegura que quedaba con los políticos y les daba en mano el sobre con el dinero.

Correa niega que emitieran facturas falsas: "Siempre lo que hemos facturado es trabajo que hemos hecho".

"Era un administrativo, sin experiencia en contabilidad, me daba dinero de la caja, de la parte que yo me quedaba de estos empresarios privados que daban sus aportaciones y yo le entregaba a Luis Bárcenas y yo me quedaba una parte, una parte en b que usaba para mis gastos personales", añade Correa sobre Izquierdo.

Correa exime de responsabilidad a sus subordinados. Asegura que el único responsable de las irregularidades es él. "José Luis Izquierdo [el contable de la trama] apuntaba lo que yo le decía", afirma. Incluso le dictaba los motes y las siglas de los que recibían las comisiones ilegales para ocultar su identidad.

Francisco Correa, durante su declaración en el juicio del ’caso Gürtel’. / EFE / MARISCAL

La declaración se ha encallado ahora por la visualización de un 'pen drive' en el que hay documentación referente a unas adjudicaciones en Castilla y León. Correa asegura desconocer la existencia de esta prueba y, en todo caso, niega cualquier gestión en esta adjudicación.

Asegura que no tenía una relación muy estrecha con López Viejo, pero sí, en cambio, con Alejandro Agag, de quien fue testigo de su boda. "Era íntimo amigo de Alejandro, pero de Alberto no". Lo declara en relación con un vídeo en el que aparecía con ambos en su barco. Según explica, López Viejo fue al barco porque le invitó Agag.

"Yo me pasaba el día en Génova, estaba más tiempo allí que en mi despacho, era mi casa", continúa Correa su declaración.

Correa explica que la relación con el PP cesa en el 2004 o 2005, cuando nombraron presidente del partido a Mariano Rajoy. Pablo Crespo no tenía buena relación con Rajoy cuando ambos estaban en Galicia. "No había una química". En ese momento, Álvaro Pérez inició la actividad con Valencia, donde gobernaba Francisco Camps. Además, la relación con Bárcenas también se enfrió.

"Lo que sí prometo es que voy a decir la verdad", responde a la fiscala, que insiste en que detalle las inconcreciones que, a su juicio, hay en el escrito fiscal.

El empresario admite, no obstante, que "posiblemente" se cometieron irregularidades en la financiación del partido en Valencia. 

Correa intenta desvincular el trabajo de sus empresas con su actividad de "lobista". "Mis empresas fueron cerradas como si fuéramos un laboratorio de cocaína", afirma, y sostiene que el juez Baltasar Garzón debería de haberle avisado.

"¿Pero dónde está el problema de regalarle una corbata a Francisco Camps?", se pregunta

Asegura que su trabajo era de lobista, pero que cuando les decía a los empresarios que le facturasen sus intermediaciones, estos empresarios no querían para que no constara en ningún lado. "Si yo hubiera facturado por mi gestión, no estaría en este tribunal. Ninguno de los empresarios querían facturar", explica.

Asegura que la declaración de Rafael Naranjo es correcta. Admite que le ingresó una cantidad en su cuenta en Suiza por una adjudicación de un ayuntamiento y que luego él la retribuyó a Alberto López Viejo.

La fiscala le insta a que detallen las "imprecisiones" que asegura que hay en el escrito del fiscal. "Es muy complicado, son 500 hojas", se queja.

Explica que el contacto directo en el PP era con Luis Sepúlveda y Luis Bárcenas. "La relación era muy estrecha". "Al final alcanzamos un punto de tanto trabajo, casi en exclusiva para el partido, que los ejecutivos que yo tenía en la compañía crearon otras empresas y se quedaron con las empresas del sector privado". A partir de ahí, iniciaron una buena relación con Sepúlveda y Bárcenas y admite que tuvo "atenciones" con Sepúlveda. "Le regalé un coche, viajes con su familia, un cumpleaños, una comunión...", explica, y añade que le regaló otro coche, pero entonces ya no tenía un cargo en el partido.

Correa defiende que en la empresa privada los regalos y las dádivas son una práctica habitual. Y pone como ejemplo un viaje que Porcelanosa pagó a sus clientes en el 'Queen Mary 2'.

"¿Tú sabrías hacer un mitin político?", le preguntó un día Bárcenas. Correa asegura que entonces no había asistido a ninguno, solo a uno con su padre, en el que participaba la Pasionaria. "Nosotros no teníamos experiencia en mítines, pero sí en grandes eventos", asegura. Entonces Bárcenas le pidió un presupuesto. "Llegó el presupuesto y se monta un revuelo. Me llamó Bárcenas y me dijo que fuera a Génova. Toda la gente estaba muy nerviosa. En aquella época Paco Cascos era el secretario general y le subí a ver. Me dijo: '¿Esto es correcto? Esto está mal'. Entonces llamé a mi oficina y llamé a la persona que hizo el presupuesto de 1.450.00 pesetas, de las que yo ganaba 400.000 pesetas. Conclusión el revuelo fue importantísimo porque el presupuesto que ellos tenían era de 11 millones de pesetas. A partir de ahí me dieron ese mitin y lo hicimos bien", explica.

Asegura que a partir de ahí empezaron a trabajar mucho con el PP. "Cuando yo digo que grandes empresarios con la política tan estricta y dura que está llevando Montoro en Hacienda, de ahí la expresión en la grabación: Yo he dado y he llevado al PP más de mil millones de pesetas. Era una expresión", añade. "Yo ahorré mucho dinero al PP y estuve trabajando muchos años con el PP no porque estuviera haciendo negocios con el PP".

A pesar de las negativas de Bárcenas, Correa siguió insistiendo hasta que un día, debido a un problema que tenían en la organización de un congreso, le llamó para contratarlos. "Solucionamos aquel problema y poco a poco don Luis Bárcenas me fue dando juego a través de la agencia de viajes". Correa asegura que en aquel momento no concía a nadie del PP. "Es más, mi afinidad política por mi padre, que fue refugiado político y pasó 40 años fuera del país, mi afinidad política era para otro bando. Pero estamos hablando de mi actividad empresarial y a mí me interesaba trabajar con el PP. "Personalmente creo que éramos buenos profesionales y poco a poco fuimos haciendo más cosas", añade.

Correa explica que un buen amigo suyo le presentó a Luis Bárcenas, a quien le presentó el proyecto de su empresa. "Era un hombre muy duro, muy complicado, muy serio, y estuvimos un año sin poder trabajar con ellos", explica.

Correa explica que su empresa trabajó con "todas las grandes empresas del país". En el año 1992, explica que tuvo una presencia importante en los juegos olímpicos. "Esto no se creó para delinquir con un partido, empezamos a trabajar con el PP en 1993 y antes trabajé con el PSOE".

Asimismo, admite haber pagado actos electorales en Majadahonda y Pozuelo de Alarcón.

Correa reconoce los hechos que se le imputan, salvo algunos hechos que están en el escrito del fiscal. Asegura que el único que no recibió dádivas fue Ricardo Galeote.

Empieza la declaración de Correa con el interrogatorio de la fiscalía.

A su llegada al juicio, Correa ha manifestado al diario 'El País' que iba a contar "toda la verdad".

Marcos Benavent, a su llegada a la Ciudad de la Justicia de Valencia, este jueves. / MIGUEL LORENZO

Marcos Benavent, más conocido como el 'yonqui del dinero', ha instado este jueves a Francisco Correa a que diga la verdad. Benavent ha lanzado este mensaje a su entrada en la Ciudad de la Justicia de Valencia, donde ha acudido para dar más detalles sobre el supuesto amaño de contratos en la empresa pública Imelsa.