El Govern recurre contra la suspensión de la Conselleria d'Exteriors

Mientras no llegue la desconexión, el Govern sigue apelando al denostado Tribunal Constitucional (la polémica declaración de ruptura pactada con la CUP asegura que el Parlament ya no se supeditará a las decisiones de este Tribunal) para defender sus intereses. En este caso, los de la creación de la conselleria de Exteriores, frente a la suspensión de las competencias de la misma ejecutada por el TC a instancias del Gobierno del PP.

La 'consellera' y portavoz del Govern, Neus Munté, ha anunciado que la Generalitat se ha personado en el conflicto para defender la plena  "legalidad y legitimidad" de la 'conselleria' . Los argumentos del Govern de Junts pel Sí distan de ser rupturistas. En su comparecencia, Munté ha asegurado que siempre el Govern, desde 1982, ha practicado la acción exterior. Y que la 'conselleria' de nueva creación tiene unas funciones que encajan en el marco estatutario. Que no desbordan la ley, en definitiva. "La creación del departamento se ajusta plenamente al Estatut y a la ley de acción exterior y que el departamento forma parte integral de las competencias de la Generalitat", ha subrayado la portavoz, al tiempo que ha mostrado la "firme voluntad de seguir haciendo acción exterior en el marco estatutario con corrección institucional como otros países del mundo". Para la portavoz, la motivación del Gobierno del PP, que recurrió la 'conselleria' ante el Tribunal ConstitucionalTribunal Constitucional, tiene más que ver con la organización interna del Govern y la creación de este departamento más que con las competencias en acción exterior.

"Detectamos no tanto una objeción a las competencias del Estatut en acción exterior sinó más bien, de lo que leemos, en relación a la organización interna del Govern que adoptó una decisión que ya constaba en el programa electoral de Junts pel Sí y consta en la investidura", ha asegurado.

BALONES FUERA SOBRE LAS PONENCIAS

Por otra parte, Munté ha evitado pronunciarse sobre si, una vez los servicios jurídicos del Parlament han desaconsejado tramitar las tres leyes de desconexión con el Estado, Junts pel Sí ha de mantener la voluntad de tramitarlas conjuntamente como ponencia o bien cambiar la formulación. "No lo hemos valorado, esta cuestión radica en el Parlament, corresponde a los grupos parlamentarios, ya dijimos que nos parecía correcto la solicitud de ponencias conjuntas y respetaremos lo que decidan los grupos", se ha limitado a afirmar Munté.