Junqueras pide "generosidad" a CDC y la CUP para culminar el proceso

ERC ha iniciado en la medianoche del jueves su campaña electoral en Cornellà, una de las ciudades símbolo de la inmigración llegada a Catalunya en los 60 y uno de los feudos del anti-independentismo. En estos días peliagudos para el secesionismo, por la pugna entre CDC y la CUP por la investidura de Artur Mas, Oriol Junqueras ha presumido del papel de mediador de su partido, un rol "histórico", y ha mandado un mensaje a los otros partidos secesionistas: "Este proceso requiere generosidad". Y quizá más enfocado a la CUP, y recordando qué tuvo que aceptar ir del brazo de Mas el 27-S, ha añadido: "Y nadie ha sido más generoso que nosotros".

La elección de Cornellà simboliza, a su vez, el ambicioso plan del líder republicano de convertir a su fuerza en la viga maestra de la izquierda catalana. "Nuestra candidatura es la de la unidad", ha clamado el presidente de ERC quien ha subrayado que la lista de ERC al Congreso pretende parecerse a la sociedad que quiere "servir".

Bajo este prisma cabe entender no solo la inclusión de exsocialistas e, incluso, exdemocratacristianos de Unió, sino también la normalización lingüístca interna que vive ERC, iniciada en el 2012, cuando Junqueras abrazó la oficialidad del castellano en una eventual Catalunya independiente, en un artículo en EL PERIÓDICO, y rubricada en esta lista con la inclusión de dos castellanohablantes en los cuatro primeros puestos de la lista al Congreso: Gabriel Rufián y Ana Surra.

PERFIL DE IZQUIERDAS

Se ha esforzado también Junqueras por enfatizar el perfil de ERC como partido de izquierdas. Ha separado el independentismo de su fuerza, que ha tildado de "temporal, pues se acabará cuando Catalunya sea independiente", de los valores del "republicanismo" y de la búsqueda de la justicia social que acompañará a Esquerra "toda su vida".

El cabeza de lista, Gabriel Rufián, se ha presentado como activista de Súmate, una entidad "que cabreó a mucha gente y sigue cabreando porque simboliza su derrota". Sacando partido de sus orígenes familiares ha afirmado que estaba seguro que sus abuelos, todos andaluces, si vivieran, "estarían aquí hoy con nosotros"."Iremos a Madrid a decir a los que siempre han ganado que esta vez han perdido, porque nosotros hemos ganado", ha sentenciado.

Joan Tardà, con todo, ha sido el que ha puesto el auditorio en pie, no en vano 'jugaba' en su ciudad natal. "Si no ganamos deprisa hipotecaremos varias generaciones de catalanes" ha afirmado el diputado en el Congreso, en referencia a la precarización social que vive Catalunya. "De las banderas no se come. No queremos cambiar una bandera por otra, sino construir un país más justo socialmente".