Ni Mas ni Junqueras, ANC

«En la ANC hemos estado años haciendo encaje de bolillos, calados, de punto entero, de medio punto... ahora hemos de dar un paso más y desencallar la situación». Así se explicaba ayer una socia de la Assemblea Nacional Catalana después de haber votado sí en la consulta sobre si la asociación ha de «impulsar una propuesta electoral» cara al 27-S. Es decir, entrar en política.

«Tras la consulta del 9-N dejamos el trabajo en manos de los políticos y han decidido ir a la suya. Es el momento de apretarlos», explica otro socio, vinculado a la organización de la consulta en el local de la ANC del barrio de Gràcia de Barcelona, en la sede de los castellers, una de las 185 sedes abiertas ayer y esta mañana y que previsiblemente recogerán un sí masivo a la pregunta. Una pregunta que, como reconoce una joven tras votar sí, es poco concreta respecto a qué hará con ella la dirección.

El presidente de la entidad, Jordi Sànchez, fue preguntado y repreguntado sobre las distintas interpretaciones del sí: lista única de partidos, lista sin partidos, listas diversas con presencia de independientes... «Es un mandato claro para poner fil a l'agulla», sostuvo. Curiosa metáfora, casi la misma que la del encaje de bolillos. Sànchez no fue más allá pero sí insistió en que los partidos independentistas se mojen antes del 27-S para gobernar juntos después. Un elemento clave dada la emergencia de alternativas en el eje de la izquierda.

Sànchez deberá trabajar, pues, con un sí con muchas derivadas pero una idea común: desencallar el procés. Para ello ya cuenta con la Associació de Municipis per la Independència (AMI), que ayer ratificó que apoyará lo que decida la ANC en favor de la lista unitaria.

«Los partidos han priorizado sus intereses políticos y personales», se lamentaba la socia Gabriela Casals tras votar también a favor. El momento es clave, y más a la vista del descenso del independentismo, según el sondeo del Govern difundido ayer. Pero parece que los miembros de la ANC, a fuerza de años con sus encajes de bolillos, han sido vacunados contra el pesimismo. «Creo en las encuestas muy relativamente, todo depende de nosotros, el sí en la consulta será una manera de decir 'espabilemos'», opinaba una profesora que votó a primera hora de la tarde. Al preguntarle por si el futuro del proceso pasa por los partidos, respondía sin dudarlo: «¿Quién sacó adelante esto en el 2010? No fueron los partidos, que ahora se han dedicado a jugar al 'yo más que tú' y 'qué maravilloso soy'». Sànchez pidió que el resultado de la consulta venga acompañado de una participación alta.

Unidad, por favor

«Si no se consigue una fórmula de unidad cara al 27-S es que son suicidas», resumía el socio Antoni Cardona tras participar. Para él, un acuerdo sería la «bomba» necesaria para cambiar la tendencia a la baja del independentismo.

No falta también la interpretación con tintes sociológicos: «Los catalanes somos especialistas en dividirnos, yo era partidaria de no implicarnos en las listas electorales pero he cambiado de opinión viendo el guirigay de los partidos. Hemos de dar un puñetazo sobre la mesa y presentarnos, sin políticos», aseveraba una joven militante. Y avisaba: la ANC ha de dar el mismo apoyo a todos los partidos independentistas por igual. Dicho lo cual, de nuevo, optimismo: «La gente se está animando y se ha dado cuenta de que no pedimos estar en manos de los caprichos de Mas y Junqueras».