Neus Munté, la 'consellera' de Benestar afiliada a UGT

Neus Munté, nueva vicepresidenta del GovernNeus MuntévicepresidentaGovern. Pese a que faltan pocos meses para las próximas elecciones, Munté consigue un premio relevante a su carrera política tras su paso por la cartera de Benestar Social i Família. Es una de las mujeres destacadas del Ejecutivo de Artur Mas cuya trayectoria siempre pretendió sensibilidad social y capacidad para la gestión, pese a recibir las críticas más duras en momentos de fuertes limitaciones presupuestarias.

Nacida en Barcelona el 13 de noviembre de 1970, es licenciada en Derecho por la Universitat de Barcelona y máster en Derecho público y Organización Administrativa por la Universitat Pompeu Fabra. Además de su militancia política en CDC desde 1996, ha desarrolló parte de su carrera profesional en UGT de Catalunya.

Entre 1996 y 1999, ocupó un puesto en la comisión ejecutiva nacional de la Federación de Servicios Públicos de UGT, y entre el 2004 y el 2010 fue secretaria de Ocupació i Educació y secretaria de Política Institucional del sindicato. En esta etapa, trabajó para proponer medidas para atajar el paro juvenil y el de otros colectivos.

En el perfil de Twitter de Munté, una herramienta que acostumbra a utilizar, la nueva vicepresidenta deja claros sus ideales sobre el futuro político que quiere para Catalunya y escribe, en catalán: "Barcelonesa y barcelonista. Catalunya es mi patria y la quiero libre. Licenciada en Derecho. Diputada en el Parlament por CiU. Soy de UGT. Si queremos, podemos".

En la esfera política, fue jefa de Gabinete de la Conselleria d'Ensenyament de la Generalitat entre 1999 y el 2002, y diputada entre el 2002 y el 2003, además de en la última legislatura, cuando fue portavoz del grupo parlamentario de CiU de la Comisión de Ensenyament i Universitats.

Antes, fue secretaria general adjunta de las Juventudes Nacionalistas de Cataluña (JNC) entre 1998 y 2000.

RECTIFICACIONES A TIEMPO

En su departamento no le ha asustado rectificar cuando alguna entidad social le ha hecho ver injusticias o equivocaciones, como cuando decidió aumentar el dinero de bolsillo para los discapacitados que viven en las residencias y que tuvieron que aumentar el copago en función de su patrimonio.

O hace pocas semanas, cuando se equivocó al cobrar con efectos retroactivos un copago a internos de una residencia de Can Ruti, en Badalona (Barcelona).

Su discurso social siempre ha acompañado a las entidades sociales con las que ha trabajado, "la lucha contra la pobreza es nuestra prioridad", se ha cansado de repetir, aunque no ha conseguido un Pacto contra la Pobreza de todos los partidos, como sí sucedió en el Pacto por la Infancia.

Munté siempre ha culpado al Gobierno central de la falta de recursos económicos para financiar las políticas sociales y, en concreto, la ley de la dependencia y buena parte del discurso de su departamento se ha basado en echar siempre la culpa a los incumplimientos del gobierno central en la Ley de la Dependencia.

Una de las mayores críticas que recibió fue cuando decidió suspender las prestaciones a las personas que estaban en geriátricos privados a la espera de una plaza pública.

Pese a ser también la responsable de las políticas de inmigración, de infancia, de juventud y de mujer -el Institut Català de la Dona depende de su consellería-, que son los colectivos más castigados por la crisis, no le han supuesto ningún desgaste político.