Suiza, capital de España

Hay 659, pero tan solo conocemos una ínfima parte de ellos. 659 son los españoles con cuentas ocultas en Suiza, según la universalmente famosa lista Falciani. El reguero de investigaciones judiciales han permitido poner nombre y apellido a algunos defraudadores y diagnosticar la evasión fiscal como uno de los síntomas más extendidos del virus de la corrupción, que no discrimina estaciones del año ni colores políticos. En el último lustro, los brotes de esta patología injertada en el sistema ha golpeado, sobre todo, al PP y a CiU, aunque se pueden hallar en la hemeroteca casos de evasión fiscal en las filas socialistas y hasta en la más alta institución del Estado.

Si identificar a los evasores ya es difícil, cifrar la totalidad del montante escondido resulta imposible. La amnistía fiscal del Gobierno hizo aflorar unos 40.000 millones de euros, pero Hacienda solo recaudó el 3% de todo el fraude. Dos apellidos, que dan nombre a sendos procesos judiciales, se llevan la palma: Bárcenas y Pujol. Pero el del expresident no es el nombre de mayor rango en esta nada honrosa lista. Iñaki Urdangarin cobró supuestamente 140.000 euros en una cuenta de Suiza por un contrato con una empresa para buscar proyectos de inversión, según sostiene la Fiscalía Anticorrupción.

Una cuenta suiza destapa una red corrupta que movió 250 millones

Bárcenas, extesorero del PP, le confesó al juez que llegó a acumular hasta 38 millones en Suiza. Su saldo y los 20 millones que ocultaba el cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, suman la mitad de los más de 100 millones que esta red de corrupción masiva evadió al fisco español. Gracias a una treintena de comisiones rogatorias a distintos países se han hallado evidencias de un supuesto blanqueo de capitales en, al menos, otros cuatro exaltos cargos del PP, en este caso de la Comunidad de Madrid.

Pero esa misma figura judicial, la comisión rogatoria, no está dando los mismos frutos en las pesquisas a la familia Pujol-Ferrusola. Suiza y Andorra han puesto trabas a la difusión de datos bancarios sobre las cuentas del expresident, que confesó haber ocultado durante 34 años una supuesta herencia paterna. Su primogénito, Jordi, está cercado por sospechosos movimientos de dinero de sus empresas (las operaciones suman 33 millones de euros) a través de bancos de 11 países distintos. Y al benjamín de la familia, Oleguer, se le atribuyen siete pelotazos que ascienden a 2.000 millones de euros.

'Pretoria' y Díaz Ferrán

A base de pelotazos urbanísticos se nutrieron también las cuentas que el sumario del caso Pretoria, de cuyo estallido se cumplieron precisamente ayer cinco años, adjudicaba a dos hombres de confianza de Pujol: Macià Alavedra y Lluís Prenafeta. El patrimonio del primero en el extranjero llegó a estimarse en siete millones de euros.

Pero la evasión fiscal no siempre lleva traje y corbata. A veces no está reñida con la fidelidad a los principios del obrerismo. En esta tentación han caído desde un presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, hasta un histórico líder minero, el exdiputado del PSOE asturiano José Ángel Fernández Villa, cuya fortuna escondida (1,4 millones) aún no se ha podido acreditar que anidase fuera de España. Para hallar su precedesor en este tipo de fraude en las filas socialistas hay que remontarse al ínclito Luis Roldán.