INVESTIGACIÓN JUDICIAL
El PP vasco afirma que la compra de su sede en Bilbao "pasó el filtro del juez"
Quiroga niega que el local se adquiriera con dinero de la caja b del partido, como apunta la policía
La presidenta del PP del País Vasco, Arantza Quiroga, ha negado que la sede del PP en Bilbao se pagara con "dinero negro" y ha recordado que hace un año enviaron toda la documentación de la compra al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz y este decidió que estaba en orden. En un intento de despejar las dudas que existen sobre esta operación, ha enfatizado que "pasó el filtro del juez".
La máxima dirigente de los populares vascos ha decidido comparecer de urgencia ante la prensa, en la propia sede del PP de Bilbao, después de que en un auto conocido este martes el juez Ruz revelara que la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional ha descubierto la existencia de otra contabilidad b creada por el extesorero del PP Luis Bárcenas.
Estos fondos opacos habrían sido utilizados para la compra y posterior reforma de la sede en la capital vizcaína. Quiroga ha asegurado que ellos son "los primeros interesados" en que se esclarezca cuanto antes todo lo relacionado con la adquisición del inmueble, "porque está en juego la honorabilidad" de su partido, "que tanto ha dado" a Euskadi. "Si alguien se ha aprovechado del PP vasco y ha mancillado su dignidad vamos a ir a por él, se llame como se llame", ha advertido.
- Las tres enfermedades que la manzanilla ayuda a combatir
- Pensionistas, solo cobraréis una parte de la paga extra en junio: esta es la razón
- Los Mossos alertan de este método de robo: "Antiguo pero recurrente
- Quién es Laura Menoyo y por qué era la visita más esperada para Daniel Sancho
- Mezcla aceite de coco y vinagre, te sorprenderá el resultado | Vídeo
- Yolanda Díaz insta a la patronal a pactar la reducción de la jornada "antes de verano" o legislará sin ella
- La Guardia Urbana rescata 14 gatos de un piso de Sant Martí
- Barcelona descarta replicar el modelo de ejes verdes al costar su mantenimiento diez veces más que en otras calles