CONTENCIOSO DIPLOMÁTICO CON GRAN BRETAÑA

El Gobierno investiga si Gibraltar ha lanzado más hormigón al mar

El ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, conversa con su homólogo británico, ayer.

El ministro de Exteriores español, José Manuel García-Margallo, conversa con su homólogo británico, ayer.

EL PERIÓDICO
MADRID

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Varios agentes de la Guardia Civil se dedicaron ayer a investigar si, como dicen haber visto algunos pescadores desde sus barcos, las autoridades de Gibraltar están arrojando nuevos bloques de hormigón en la bahía, redoblando así su órdago al Gobierno español. Además, miembros de ese mismo cuerpo de seguridad se ocupaban, por orden del Ejecutivo de Mariano Rajoy, de impedir el paso de camiones con arena y roca procedentes de playas de Tarifa hasta Gibraltar para evitar la construcción de un espigón artificial en el Peñón, una vez que la fiscalía ha abierto diligencias para investigar si hay empresas o autoridades españolas tras el trasvase de arena desde zonas protegidas hasta suelo gibraltareño, un hecho que podría constituir un delito medioambiental.

Precisamente la defensa del medioambiente en el seno de la Unión Europea fue lo que esgrimió el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel García-Margallo, cuando ayer se le preguntó en Bruselas por qué se estaba vetando la entrada de camiones areneros en Gibraltar. Además, el jefe de la diplomacia insistió en que España y el Reino Unido deberían impulsar un diálogo «posible y urgente» para superar la crisis, aunque puntualizó que el lanzamiento de hormigón a aguas que considera españolas «ha roto la relación de confianza» que existía con Gibraltar y, además, ha provocado que se vea con recelo el tránsito en la frontera, dijo, por lo que se han intensificado unos controles que han llegado a provocar hasta siete horas de retenciones.

COINCIDENCIA CON HAGUE / «En el momento en que la confianza se restablezca es más que probable que podamos disminuir unos esfuerzos que son muy gravosos para el Gobierno español, si contamos con la colaboración de Gibraltar», dijo en rueda de prensa en Bruselas, donde acudió a la reunión urgente de ministros de Exteriores para abordar las medidas a tomar frente a la crisis en Egipto. Allí coincidió con su homólogo británico, William Hague, a quien pretendía hacer llegar su deseo de abordar «muy pronto» el contencioso. Pero fue el propio Margallo quien, no sin cierta sorna, explicó a los periodistas que no fue posible y que solo tuvieron tiempo para interesarse por el «bienestar» de sus «respectivas familias» este verano.

Ya en un contexto más serio, el ministro de Exteriores -que comparecerá el próximo 3 de septiembre en el Congreso para dar cuenta de su estrategia ante Gibraltar- insistió en que España está dispuesta a dialogar desde ya con los británicos (bien en formato bilateral o bien a cuatro bandas, incluyendo a las autoridades de la Junta de Andalucía y el Peñón) para tratar asuntos de pesca y medioambiente. Eso sí, retirando antes el hormigón.