Pérez Rubalcaba dice que si pierde "se pondrá a pensar"

El candidato socialista a lapresidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha afirmado que lo primero que hará si pierde las próximas elecciones generalesserá sentarse "a pensar".

En una entrevista a Cuatro,Pérez Rubalcaba ha definido como "correcta" su relación con el líder del PP, Mariano Rajoy, y ha destacado que ambos son "muy amantes del deporte", con una diferencia: "yo lo practico y él no".

Pérez Rubalcaba ha recalcado que él es el líder del PSOE por ser quien se presenta a las elecciones, ha elogiado aFelipe Gonzálezcomo "el mejor presidente de la democracia, con toda claridad", y ha indicado que, durante la campaña, se le podrá ver en actos políticos conJosé Luis Rodríguez Zapatero,al igual que "con todos" sus demás compañeros. "Me queda una faenita por delante...", ha añadido en tono distendido.

En el caso de que gane estos comicios, lo primero que hará será intentar buscar un gran acuerdo sobre el empleo y acudir a Bruselas para decirle al resto de gobernantes de la UE que "no basta con austeridad" para salir de la crisis. "Si te pasas en austeridad puedes abocar laeconomía a la depresión", ha advertido Pérez Rubalcaba, partidario de fomentar la inversión pública con un "presupuesto europeo de inversiones" y convencido de que la UE "se va a replantear" su política de austeridad.

Revisar el impuesto de sociedades

El candidato socialista ha abogado por subir los impuestos a las grandes fortunas, más allá del tributo sobre el patrimonio, y también a la banca cuando concluya su reestructuración, siguiendo el ejemplo de Francia, y se ha mostrado a favor de "revisar el impuesto de sociedades".

Sobre el fin de la actividad terrorista de ETA, está seguro de que esta organización ha abandonado las armas "para siempre", si bien cree necesario que la Policía y la Guardia Civil "no bajen la guardia", y propone esperar al día después de las elecciones para que los partidos consensúen una nueva política antiterrorista.

También piensa que será preciso introducir algún cambio en la política religiosa, tras aclarar que el Consejo de Ministros nunca llegó a abordar el proyecto de ley de Libertad Religiosa, aunque apela a la prudencia y la "sensatez" a la hora de estudiar cualquier modificación en este terreno.