La cuenta atrás

El rival preferido de CiU

Juntos pero no revueltos 8 El ganador, Jordi Hereu, y Montserrat Tura, ayer, en el Hotel Avenida Palace de Barcelona.

Juntos pero no revueltos 8 El ganador, Jordi Hereu, y Montserrat Tura, ayer, en el Hotel Avenida Palace de Barcelona.

XABIER BARRENA
BARCELONA

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Xavier Trias ya tiene rival. Como si fuera un cuadro de la ATP de tenis, en la casilla del PSC aparecía, hasta ahora, la leyenda «vencedor entre Hereu-Tura». CiU, pues, ya le pone cara al enemigo. Jordi Hereu, el rival preferido por los convergentes. Aunque solo sea porque en los sondeos, por ejemplo el de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA, arrojan una distancia entre Trias y Hereu de 15 puntos. El rival preferido, sí, pero de manera despreocupada.

Los nacionalistas hablan de las primarias socialistas con distancia. Como si no fuera con ellos la cosa:«Gane quien gane, seguirán llevando 32 años al frente del ayuntamiento. Una eternidad. Los barceloneses reclaman un cambio».Este es el discurso casi oficial, el que señala que les daba igual que ganara Hereu que Tura. Y sobre las propias primarias, el juicio no es muy halagador. «Hemos visto pura pornografía precongresual»,afirma una voz del partido, en referencia al pulso entre la federación de Barcelona y la dirección nacional de los socialistas.«Si el PSC hubiera estado bien, si hubiera sido la máquina que a veces ha llegado a ser, habría apoyado a Hereu hasta el final y sin primarias»,sentencia.

Según este analista,«los socialistas ofrecieron durante años una propuesta solvente para la ciudad. Hereu lo ha transformado en un modelo de ciudad del PSC. Las ansias de cambio son evidentes».

Según el esquema que manejan los convergentes, la campaña electoral girará alrededor de dos ejes: el del liderazgo y el del modelo de ciudad. Si hubiera ganado laexconsellera,la táctica de los nacionalistas habría sido poner el acento en el modelo de ciudad ante una contrincante ajena a la vida municipal. Ahora, con el actual alcalde, se pisará el acelerador con el liderazgo. Más todavía cuando cerca del 40% de los militantes y los simpatizantes de su propio partido no lo querían como candidato.

Burbuja mediática

La principal obsesión de los nacionalistas, sin embargo, es romper la burbuja mediática en la que todos los partidos han sido encerrados a cuenta de las elecciones primarias. Y, lógicamente, el más inmediato de los objetivos socialistas es seguir copando las primeras páginas de los diarios durante unos días más, estirar como un chicle eseefecto primarias.

Fuentes cercanas al alcalde señalaron que de manera inmediata se va a intentar que Montserrat Tura se implique de alguna manera en el proyecto de Hereu. Ha quedado claro que la extitular de Justícia e Interior no aceptará entrar en las listas, pero ya se le ha hecho llegar que puede haber intereses coincidentes en un futuro: «Está claro -señala la misma fuente- [que el camino de laexconsellera] no se detenía en Barcelona». «Sobre sus otros objetivos nosotros no tenemos nada que objetar y quién sabe si podríamos serle de ayuda», afirma en referencia clara al congreso del próximo otoño.

El siguiente paso será, obviamente, llenar la agenda del alcalde de aquellos compromisos, léase inauguraciones, que puedan avalar el modelo de Barcelona que defiende el candidato, esa mezcla de tocho y ciudad de las personas en que ha acabado el mandato, tras apostarlo todo, al inicio, a las políticas sociales.

Queda la asignatura pendiente del liderazgo. Algo que se le ha discutido ferozmente dentro del partido, en Barcelona y en Madrid. La relación con el PSOE, más que distante, parece que empezó a tejerse de nuevo ayer mismo, solo una semana después de que en la convención municipal socialista apenas se reflejara nada de lo hecho por Hereu en la principal ciudad española en manos del partido.

Tras la victoria, Hereu recibió la llamada del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, quien además de felicitarlo le transmitió su compromiso con Barcelona y su candidatura. En la alcaldía ya piensan en coger al vuelo esta predisposición y proyectan una visita de Hereu a la Moncloa. Tras pelear en solitario -junto con la federación de Barcelona- contra tirios y troyanos, cree Hereu que es el momento de recibir la ayuda negada.

Montilla, al aparato

También llamó el primer secretario del PSC, José Montilla. Eso sí, sin el calor o, al menos, las ganas de hacer borrón y cuenta nueva que transmitió Zapatero. Quedan aún muchas heridas por restañar.

Ahora es el momento, también, de presentar el ambiciosoplan Besòs. Un proyecto de proyectos de carácter metropolitano -adelantado por este diario- cuya puesta de largo estaba prevista en plenas elecciones primarias. Hasta que los otros alcaldes implicados (Badalona, Santa Coloma, Sant Adrià y Montcada) se opusieron, algo que sentó mal en el ayuntamiento barcelonés. ¿Pasará factura ahora Hereu?«No. No va en su ADN»,señala un buen conocedor del alcalde.