A la sombra de Mas

Unos ahorran y otros se forran

RAFAEL DE RIBOT

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Ya se sabe que hay quien no pierde oportunidad para intenta acercar el agua a su molino. Con eso de la imagen pobre del candidato progre,Joan Herreraha incorporado a su catálogo de propuestas de campaña que todos los cabezas de cartel hagan público su patrimonio personal. Cuando ayer le preguntaron aArtur Massi estaba dispuesto a hacer ese gesto de transparencia, el convergente dijo que no tenía ningún inconveniente si todos los demás estaban de acuerdo.Masdijo no entender que con el sueldo de los políticos haya quien diga que no tienen nada, y apuntó que o bien no dicen toda la verdad o bien viven por encima de sus posibilidades; el candidato confesó que «gracias a los años de trabajo» de él y de su mujer y lo que han ido ahorrando los dos no está «pelado como una rata».

PeroMastampoco es de esas ratas peludas a las que pillan en un despiste reconociendo que se han metido en política para forrase, porque piensa realmente que podía haber tomado otros muchos caminos para ganarse bien la vida y porque si sucumbiera a la tentación de meter la mano en la caja el tormento de los remordimientos no le dejaría vivir. Las insinuaciones y las acusaciones de supuesta financiación irregular de su partido le incomodan tanto por lo que le puedan afectar políticamente como por lo que le repugnan moralmente.

Mases una persona forjada en la ética de la autoexigencia, y nunca sitúa el listón para los otros por encima de la medida que él es capaz de superar. Entiende la política como un servicio y al cabo de los años casi ha pasado a vivirla como una obligación. Si no ha tirado la toalla después de haberse pasado 12 años en la oposición entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Parlament, es porque está convencido de que solo las ratas -las de todo tipo de pelaje- abandonan el barco cuando amenaza zozobra.