Los abogados de oficio del 11-M chocan con Justicia por sus pagas

MARCO SCHWARTZ / MADRID

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El juicio del 11-M no para de sufrir sobresaltos desde que la vista ha entrado en su recta final. Un día después de que los procesados que se encontraban en huelga de hambre depusieran su órdago, ayer correspondió protestar a los 22 abogados defensores de oficio. El motivo: el supuesto incumplimiento en el pago de sus honorarios. El Ministerio de Justicia respondió en un comunicado que la próxima partida de los letrados será abonada "en breve" y negó cualquier retraso en las retribuciones.

El pulso de los abogados coincidió con la cuadragésima jornada del juicio, en la que varios peritos confirmaron la presencia de restos biológicos Abdelmajid Buchar y Basel Ghalyun, dos de los presuntos autores materiales de la masacre, en el piso de Leganés donde se inmolaron siete islamistas el 3 de abril del 2004.

"MEDIDAS" En un comunicado divulgado a la prensa, los abogados de oficio exigieron a Justicia que "cumpla en el más breve plazo" los compromisos económicos. Advirtieron de que el pago es indispensable para continuar ejerciendo su labor con "dedicación e intensidad" y amenazaron con "tomar otras medidas" en caso de no recibir sus emolumentos. No precisaron las medidas, aunque en la nota avisan de que el derecho de los acusados a la "mejor defensa posible" contribuye a la "plenitud de garantías" del proceso.

Los letrados se quejaron de la "precaria situación económica" en que desarrollan su tarea. Alegaron que desde el comienzo de su trabajo, hace tres años, solo han recibido los 5.000 euros correspondientes al número de folios del sumario (57 euros por cada mil folios), de los 20.000 pactados por todo el trabajo.

"CELERIDAD" El Ministerio de Justicia negó la existencia de retrasos y alegó, por el contrario, que el asunto se está tramitando con la "máxima celeridad". En ese sentido, recalcó que en el departamento "no consta queja alguna" de los letrados por los supuestos incumplimientos.

En el comunicado se explica que, en octubre pasado, Justicia, el Colegio de Abogados de Madrid y los letrados alcanzaron un acuerdo por medio del cual se les pagaría a estos últimos el triple de los establecido legalmente para el turno de oficio, dada la "excepcionalidad de la causa, el gran volumen y complejidad del sumario y la responsabilidad con que han actuado". Ello les supone 945 euros por asistencia, 57 euros por cada mil folios de sumario y 57 euros por cada cinco comparecencias. En total, 420.000 euros (20.000 por abogado).

DOS PARTIDAS Según Justicia, una primera partida, de 113.451 euros, se abonó el 29 de diciembre. El 8 de mayo se recibió una segunda petición de pago del Colegio de Abogados, por 74.875 euros, cuya tramitación se inició de inmediato y está pendiente del informe de la Intervención de Hacienda para su pago.

Dentro de la sala del juicio, varios peritos policiales y médicos contaron cómo se identificaron por medios científicos a algunos procesados y a los inmolados en el piso de Leganés. En los escombros de Leganés se hallaron restos de ADN del procesado Buchar en huesos de dátil y aceituna, y de Ghalyun en un gorro blanco. Buchar también dejó rastros genéticos en una cuchilla de afeitar en la finca de Morata de Tajuña, donde se prepararon los atentados.

VOCES DISTINTAS Otros dos peritos, expertos en acústica forense, revelaron a su vez que las voces de los vídeos reivindicativos hallados en Leganés difieren de la que reivindica los atentados en la cinta hallada el 13 de marzo del 2004 en una papelera próxima a la mezquita de la M-30.

De los tres presos islamistas que testificaron por videoconferencia desde Francia, el más significativo, Attila Turk, se desdijo de sus declaraciones iniciales. Admitió que hospedó a Hassan el Haski, uno de los presuntos ideólogos del 11-M, en su casa, pero dijo no recordar si fue antes o después del 11-M. Y no recordó que El Haski se hubiera "molestado o enfadado" cuando en un comienzo se atribuyó la matanza a ETA.