Pol López, actor: "Está faltando salir a la calle"

Si uno metiera en una coctelera a Zach Galifianakis –el Alan de 'Resacón en Las Vegas'– y a Kenneth Branagh, el resultado se parecería bastante a Pol López (Barcelona, 1984), un actor que se sale cuando parodia a Nadia Comaneci ('Crackòvia'), levanta un 'Hamlet' o se mete en un thriller rural (la premiada 'Suro'). Ahora, mientras rueda una serie en Madrid para una plataforma, se estrena 'Esperando a Dalí', una comedia histórico-culinaria ambientada en el Cadaqués de 1974. 

Le da al clásico y a la parodia, sin problema.

Ser actor va de eso. De probar textos, personalidades y naturalezas. De entender otras ideologías y meterte en otros cuerpos. Me gusta buscar el límite.

"Siempre me rompo la cabeza, le doy vueltas constantemente a las cosas"

En algún sitio habrá más dificultad...

La dificultad siempre la tengo. ¡Se lo juro! Que me guste y tenga cierta disposición a interpretar es un tema, pero a mí me resulta difícil cualquier material. Siempre me rompo la cabeza, le doy vueltas constantemente a las cosas.

¿Qué tipo de animal escénico es?

¿Un koala?

"Vivir, en realidad, es estar muy metido en algo. Es después cuando dices: '¡Cómo he disfrutado!'"

No tiene su seguridad.

Es que no hay seguridad. Nunca la hubo. Lo que hay es obcecación. Vivir, en realidad, es estar muy metido en algo. Es después cuando dices: "¡Cómo he disfrutado!".  

¿Malos tiempos para el disfrute?

El momento es de una enorme tristeza. Da mucho miedo ver cómo se va extendiendo la extrema derecha.

Veto a 'Lightyear' en Santa Cruz de Bezana, a 'Orlando' en Valdemorillo...

Es muy bestia.

¿Le ha rozado a usted la censura?

Por suerte, no lo he vivido en mi piel. Pero estoy un poco cansado de decir #StopCesura por Twitter y a otra cosa. Está faltando salir a la calle, que es el espacio donde convertir el desacuerdo en clamor. Lo vimos en la primavera árabe, cuando Twitter solo era una herramienta de comunicación; lo hicieron los chalecos amarillos en Francia. Yo mismo soy cómplice de la pasividad. Debería hacer más visible mi oposición a la pérdida de derechos.

¿Se ve capaz de anticipar un escenario?

No tengo ni idea. Si llega la negrura, veremos qué hacer.

"Si llega la negrura, veremos qué hacer"

"Ser libres para obedecer".

Es una frase de Santa Teresa, que inspira 'Mal de coraçon', la obra de teatro que vengo haciendo con mi compañía, La Solitària. Aunque Simone Weil, ¡guau!, tiene algunos aforismos aún más descolocadores. En 'La gravedad y la gracia', especialmente.

El concepto amplio de libertad le viene en el ADN.

Totalmente.

Es hijo del respetado fundador de la revista 'Cáñamo'. 

Me criaron en un entorno muy libre, pero me quedo con la enseñanza de perseguir la honestidad en lo que haces. A intentarlo, al menos. Es lo que trato de trasladar a Ciro, mi hijo, como también la importancia de sentirse bien con aquello que haga, que no tiene por qué ver con el trabajo.

"Me criaron en un entorno muy libre, pero me quedo con la enseñanza de perseguir la honestidad"

¿Recuerda el primer atisbo de vocación?

Corre un vídeo casero en el que yo, con 7 años, aparezco imitando a El Cordobés del programa 'Al ataque'. Cuando lo vi, pensé: "Me meto demasiado, es un poco angustiante". Es perturbador ver a un niño observar así a las personas e intentar interpretarlas con todas las ganas.

Luego, de adolescente, se enganchó a John Cassavetes. Un raro.

Mis padres tenían Canal+ y recuerdo ver la escena de Peter Falk y Gena Rowlands ['Una mujer bajo la influencia'] y no entender nada. Me pareció que era un documental, pero me volví muy loco y alquilé todas las pelis.

¿Otros dioses en su altar?

Unos cuantos. Está Paul Thomas Anderson ['Magnolia', 'The Master', 'Licorice Pizza'], por ejemplo.

"Siento que cada vez tengo más herramientas. Pero sigo intentando no cagarla"

¿Cuántas estaciones le quedan para alcanzar su meta?

Salir en 'Hot Shots!' Si acaso, siento que cada vez tengo más herramientas. Pero sigo intentando no cagarla. Ahora estoy trabajando en un personaje para una serie que no habla como yo y, ¡hostia!, estoy obsesionado.

¿Se anima a titular un documental autobiográfico?

'X' quizá. La incógnita de una ecuación.

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