Ágora

Un año de pandemia y de 'she-cession'

Un gran avance en digitalización pero un triple mortal atrás en igualdad. Este podría ser, en suma, un posible balance económico de 2020

Una mujer teletrabaja en Barcelona debido a las restricciones por la pandemia de la covid-19, acompañada de su hijo

Una mujer teletrabaja en Barcelona debido a las restricciones por la pandemia de la covid-19, acompañada de su hijo / Ferran Nadeu

Meritxell Bautista

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Un gran avance en digitalización pero un triple mortal atrás en igualdad. Este podría ser, en suma, un posible balance económico de 2020, un año que lo ha cambiado aunque, más que 365 días, durará décadas. Algunos pensadores, los más optimistas, dicen que ha sido un gran acelerador de la transformación digital y que nos hará avanzar hacia una sociedad más justa y sostenible. Confiemos en ellos. Lo cierto es que el salto tecnológico de empresas, instituciones y usuarios en pocos meses es evidente. La transformación digital ha hecho un acelerón que nos debe hacer más competitivos.

Pero 2020 también ha supuesto un salto atrás en igualdad. De nuevo, 'oh, sorpresa', las mujeres están entre las más afectadas por los efectos económicos de la pandemia. En todo el Estado, la tasa de desempleo de las mujeres ya supera el 18% mientras la de los hombres es del 14,39%, la mayor brecha desde 2007. Intermon Oxfam denuncia que la pobreza ha crecido más de un 11% en Catalunya y alerta del perfil más vulnerable: mujer, joven, migrante y con bajos estudios. En Estados Unidos ya le han encontrado un nombre: 'she-cesión', 'she + recesión', ella + recesión.

El balance de este año excepcional tampoco es muy bueno para las mujeres que no han perdido su trabajo pero se han tenido que adaptar al teletrabajo en tiempos de pandemia. La ONU advierte que, durante 2020, las mujeres han seguido haciendo el triple de tareas domésticas y cuidados no remunerados que los hombres. Solo un ejemplo: un estudio de la Universidad Complutense dice que, antes de la pandemia, las investigadoras dedicaban 6,2 horas semanales a trabajar en sus artículos (la clave del prestigio académico). Durante la crisis del covid tuvieron que reducirlo a 1,6 horas. Los investigadores, en cambio, pasaron de 7 a 8,1horas. Parece evidente quién tuvo que asumir la carga en las tareas del hogar y el cuidado de los hijos.

Salimos ya en situación desigual en la deseada carrera por la recuperación económica post-pandemia. Una recuperación que, en reuniones de grandes líderes donde las mujeres son una excepción, se ha consensuado que tendrá dos grandes ejes: transformación digital y sostenible. No dejemos que las mujeres queden fuera. Sumemos esfuerzos para que ellas también lideren esta revolución desde puestos de responsabilidad, en empresas tecnológicas, en materias estratégicas para nuestra economía: ciencia, tecnología, ingeniería, matemáticas... Las administraciones públicas tienen la gran responsabilidad y el deber de hacerlo lo posible. Pero todos podemos contribuir, la empresa privada también. Con humildad, desde Fibracat TV, el canal de TDT en catalán y en abierto para toda Catalunya que tengo el orgullo de presidir, lo intentamos hacer cada día visibilizando a mujeres líderes en todos estos sectores clave. Mujeres que inspiran a otras mujeres, jóvenes y niñas. Admitamos que los efectos económicos de la pandemia han golpeado especialmente a las mujeres. Pero no dejemos que también queden atrás en la recuperación. Básicamente, no nos lo podemos permitir.