'Back office'

¿Es el 'blockchain solo una moda?

La teconología que se hizo popular con el bitcoin y otras criptomonedas se ha exentedido y ha llegado para quedarse

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Carles Gómara

Carles Gómara

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La primera vez que muchos oyeron por primera vez qué era el 'blockchain' fue en el 2017. Fue cuando la valoración de la criptomoneda bitcóin llegó a 20.000 dólares. Pero el concepto nació en el 2008, inventado por el señor o señora Satoshi Nakamoto. Aún hoy se mantiene el misterio de su identidad y probablemente nunca la conoceremos. Su objetivo era crear la primera criptomoneda del mundo fuera del control de gobiernos y bancos centrales.

Tan enigmático fue el nacimiento de esta tecnología como lo es su funcionamiento. Simplificando, 'blockchain' es la tecnología que permite crear criptomonedas, y bitcóin es la primera. Desde entonces, usando blockchain han aparecido miles de criptomonedas. Las más famosas, aparte de bitcóin, son Ethereum, Ripple, Bitcoin cash, Cardano, Stellar, Litecoin, EOS…

Esta ha sido la primera aplicación clara de esta tecnología. Permite transferencias de punta a punta del mundo en pocos minutos, menos comisiones, una transacción anónima y con seguridad elevadísima. Es imposible modificar la información que se almacena. Pero como ha ocurrido otras veces, se han creado muchas otras aplicaciones. Prueba de ello es que, a parte de que las patentes se han multiplicado, se estima que el gasto mundial en soluciones 'blockchain' llegó el año pasado a 2.900 millones de dólares, un 88% más que en 2018.

Son aplicaciones en sectores dispares como la alimentación o la logística (trazabilidad, desde que se produce hasta que se consume o distribuye), el comercio (para identificar productos falsificados) o la sanidad (para cifrar datos médicos). O incluso los contratos: con el 'blockchain' aparecen los 'smart contracts', que impiden cualquier retraso, censura, fraude o interferencia de terceros y que están programados para verificar y hacer cumplir sus cláusulas automáticamente sin la aprobación de un intermediario.

Se trata de aprovechar las ventajas de descentralizaciónseguridadprivacidad transparencia que aporta el 'blockchain', que actúa como una base de datos encriptada y  compartida por todos sus usuarios. Muchas de estas aplicaciones ya se desarrollan en Catalunya. Actualmente tenemos identificadas 76 empresas -muchas 'start-ups'- que trabajan con esta tecnología, un número que se ha duplicado en poco más de un año según un estudio de Acció y el Departamento de Políticas Digitales.

Podemos poner ejemplos  como el de trazabilidad de huevos ecológicos de la empresa Montsoliu desarrollado por Vottum; la firma BlockTac y sus soluciones para reducir fraudes o la gestión de residuos lanzada por Ecoembes, entre otras muchas iniciativas. En los próximos años veremos cuáles son los usos más exitosos del 'blockchain', pero lo que es seguro es que esta tecnología ha llegado para quedarse.