Al contrataque

Qué antiguo es el presente

La película 'Yesterday' se basa en la premisa de que todo el mundo ha olvidado las canciones de los Beatles... Que cada cual deslice su propia lista peliculera

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Xavier Sardà

Xavier Sardà

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La película 'Yesterday' se basa en la premisa de que todo el mundo ha olvidado las canciones de los Beatles. Un músico que lucha por abrirse camino se da cuenta de que es la única persona en el mundo capaz de recordar al legendario grupo. Sugestivo. Que cada cual deslice su propia lista peliculera.

Imagino que nadie se acuerda de la música de Lluís Llach. Nada, ni 'L’estaca', ni 'La gallineta' ni 'Ítaca'. Nadie recuerda a Llach. Su música, como la de los Beatles, se ha borrado de la faz de la tierra. Solo una persona recuerda esos temas y decide cantarlos de nuevo ante la estupefacción general. Es Isabel Pantoja. 

Imagino que nos hemos olvidado del ‘procés’. Solo lo recuerda Gabriel Rufián. Al oírle lo toman por loco y se tiene que dedicar al top manta. Ada Colau se enamora locamente de él. Comedia romántica y de terror gótico. Toni Soler hace el tiempo en TV-3, medio en broma.

Imagino que nos hemos olvidado de la religión y nadie se acuerda ya del dogma de la Inmaculada Concepción, ni de la fe en la autoridad espiritual efectiva de la Iglesia para perdonar los pecados.  Vamos, que están olvidados los mandamientos, los sacramentos y la Santa Sede, reconvertida en macrodiscoteca. Solo una mujer siente la fe católica. Solo Marta Ferrusola recuerda el amor en Cristo y la fe en la Virgen de Meritxell, patrona de Andorra. «Soy la madre superiora de la congregación, traspasa dos misales». Emoción y transmigración… de capitales.

Obstruir y paralizar

Imagino que los partidos políticos se olvidan de obstruir y paralizar los gobiernos. Vamos, que se abstuvieran cuando alguien ganase claramente las elecciones sin mayoría absoluta. En la película no se repiten elecciones y los políticos pueden dedicarse a solucionar problemas.

Pablo Iglesias quiere asaltar el cielo y no la vicepresidencia. Albert Rivera se reúne con Pedro Sánchez con salmonela y todo, y Pablo Casado se hace budista, para ver si consigue reencarnarse algún día en un auténtico líder político.

Imagino que nos hemos olvidado del Barça y que solo lo recuerda Neymar, que se pelea consigo mismo por las duras entradas que se hace. Juega solo y pide revisiones del VAR. Se ficha y se desficha a cada momento. Más tarde crea una liguilla en la que compiten JxCat, Esquerra y Cabify. Tampoco saben jugar a fútbol.

Imagino que la gente olvida a todos los presentadores tertulianos baratos del mundo. Solo los recuerda Monegal. Nadie le cree. No puede haber sido cierto. Película de 'frikizombis'.