"Son picoletos"

Vivimos tiempos convulsos y extraños. Algunos podrían llamarlos "surrealistas", pero me temo que hemos abusado demasiado del término. Quizás deberíamos decir 'subrealista', que es como hablaba un amigo mío. O absurdos, porque lo absurdo es lo que es contrario a la razón y al sentido común, aunque me temo que ni siquiera así seríamos capaces de llegar a perfilar el rostro de los días que vivimos.

Por ejemplo, el famoso incidente del furgón de la Guardia Civil que navega entre manifestantes independentistas en dirección a la cárcel de Brians. No solamente las risas sardónicas o el simple hecho de que un funcionario se dedique a grabar una escena tan innoble para luego hacer ostentación de ella. No. La música de fondo. Sonaba 'OVNI', que significa Objeto Verde Nada Inteligente, de aquel grupo de punk vasco - Piperrak - que tuvo momentos de gloria radical y que se disolvió hace años. Ahora han vuelto, al menos el vocalista (¿se puede hablar así de un cantante punk?), y han vuelto a grabar la canción. Esta es la versión que escuchaban los agentes.

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Soy incapaz de reproducir la letra porque los insultos a la Guardia Civil, tratados, sus miembros, como si fueran extraterrestres, me podrían llevar a la cárcel. Solo un fragmento: "No pueden ser humanos porque no tienen corazón". Escuchaban esto. ¿Por qué? Desconocimiento, seguro que no. ¿Una provocación? ¿Un préstamo irónico? ¿Un bumerán contra el enemigo? ¿Un enorgullecimiento? Todavía no me he recuperado de la impresión.