Estatura

Pues sí, parece ser que todo es una cuestión de estatura. Christine Lagarde, directora del FMI (Fondo Monetario Internacional), ha sido condenada por negligencianegligencia, pero exonerada por su estatura política internacional.

Vayamos por partes. Tenemos el FMI, una institución con alma de usurera que se caracteriza por su capacidad para ahogar países con deudas impagables y por ofrecer su dirección a lo mejorcito de cada casa. Por ejemplo, a Dominique Strauss-Kahn, especializado en escándalos sexuales, y a Rodrigo Rato, acusado de un surtido de delitos financieros.

Sigamos. Resulta que Lagarde es declarada culpable de negligencia por la justicia francesa. Permitió que se jugará a los trileros mientras ella era ministra de economía del gobierno de Nicolas Sarkozy. Y la pelotita se convirtió en un pelotazo de 403 millones esquilmados a las arcas públicas y desviados a Bernard Tapie. Gran amigo, precisamente, de Sarkozy.

CONTEXTO DE CRISIS

Pero resulta que Lagarde tiene una gran estatura política internacional. Eso ha dicho la justicia. También que los hechos ocurrieron en un contexto de crisis mundial. Así que queda libre de culpa y seguirá al mando del gran instrumento de extorsión. Ese que hunde en la miseria a millones de personas que siempre viven en crisis, pero que, ya se sabe, carecen de estatura.

Debe ser verdad, si ellos lo dicen. Aunque Lagarde apenas parece estar a la altura de una de nuestras figuritas del pesebre… Ya sabemos cuál.