Reflexiones cara a la Diada

"Yo iré o no a la Via Catalana en función de mi disponibilidad física y de lo que en conciencia crea que tengo que hacer. ¡Y ya está! ¡Así de sencillo!"

Miles de ciudadanos se manifestaron en la Diada del 2012

Miles de ciudadanos se manifestaron en la Diada del 2012 / nip

Josep Antoni Duran Lleida

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Queridas amigas y queridos amigos,

Aunque en la última carta semanal de julio me despedí hasta la semana del 11 de septiembre, me he creído con el deber de avanzar nuestra correspondencia electrónica para comentar nuestra opinión y posición sobre la Diada nacional de este año.

La situación política --y no hace falta decir, la económica y la social-- es más compleja que nunca y necesita reflexiones más profundas que nunca. La simplificación no sirve para los tiempos que corren. Y esta afirmación quizá no evitará que yo mismo pueda caer en este error y que, de lo que hoy escribo, se hagan simplificaciones que puedan sesgar el conjunto de la carta. En todo caso, siempre permanecerá escrita con su total extensión para quien tenga interés en conocer su contenido y no las interpretaciones que se hagan.

Creo recordar que fue a comienzos de agosto cuando el secretario general del comité de gobierno, con el apoyo unánime de la permanente --su ejecutiva-- remitió una carta a la presidenta de la ANC y a la de Òmnium Cultural en la que se reflexionaba en torno a la necesidad de que la Via Catalana, convocada por estas dos organizaciones, fuera capaz de aglutinar el máximo posible de expresiones del catalanismo político y fuera inclusiva y no exclusiva. Creemos que todo el proceso político emprendido en Catalunya tras las últimas elecciones al Parlament requiere la máxima transversalidad posible, la suma de cuantas más fuerzas políticas mejor. El proverbio "si quieres ir rápido ve solo, si quieres llegar lejos, ve acompañado" expresa claramente el porqué de la posición de Unión.

Por eso pedimos a los organizadores que reflexionasen sobre la necesidad y la oportunidad de abrir el lema de la convocatoria 'Cap a la independència' al ejercicio del derecho a decidir. Y digo ejercicio porque creo que el derecho ya lo tenemos, aunque es cierto que los derechos no lo son hasta que se ejercen. En el Parlament de Catalunya y en el propio Congreso de Diputados se han logrado grandes mayorías en torno al derecho a decidir. CiU, ERC, ICV, EUiA, CUP y también --y muy importante-- el PSC han votado lo mismo. De hecho --y no tenemos derecho a ignorarlo--, por primera vez en las Cortes españolas el PSC mantuvo un voto diferente al del PSOE. ¡Y en una cuestión tan importante como esta! El derecho a decidir, por tanto, suma. La independencia es una propuesta legitima, pero divide .

Nuestra propuesta es confederal, no independentista

Identificar el ejercicio del derecho a decidir con la independencia es una opción, pero no la única. Insisto: es muy respetable, pero no es compartida por todos los que defendemos el derecho a decidir. Unió, por ejemplo, no es un partido independentista. Nuestra propuesta es confederal. Tampoco --a pesar del interés en colgarnos el sambenito-- somos anti-independentistas. Gracias a Dios, no somos antinada, ni antinadie. Nos definimos en relación a nuestras propias posiciones y no en relación a terceros. Ni siquiera sentimos pánico ante la independencia. Pero lo reitero: no somos independentistas como partido, aunque en el seno de nuestra militancia --e incluso de la dirección-- hay sensibilidades independentistas, lógicamente respetables.

Las respuestas de los organizadores al planteamiento político de Unió fueron diversas. El vicepresidente del ANC dijo que quien asistiera a la cadena sería contado como independentista y fue, por tanto, cierta y claramente excluyente. Desde la presidencia de esta organización se apuntó un lema satisfactorio para Unió: "¡Queremos votar!" Es mucho más integrador. La presidenta de Òmnium Cultural intentó despreciar a Unió y declaró que no había que preocuparse por nuestra posición porque éramos pequeños. No tengo intención de polemizar sobre esta afirmación, más allá de decir que es descaradamente excluyente. No merece la pena. En todo caso, la propuesta de Unió de abrir el debate no tuvo para nosotros respuestas suficientemente positivas, sin que dejemos de respetar algunas.

Alrededor de Rafael Casanova

A pesar de todo, Unió valora muy positivamente este debate. Y no nos hemos sentido solos. Otras fuerzas políticas, como ICV, se han posicionado en términos parecidos. También dirigentes socialistas del llamado públicamente sector crítico han hecho pronunciamientos equivalentes. Y no olvidemos los posicionamientos de los principales sindicatos y sobre todo el sentimiento de muchos ciudadanos. En este marco llegamos a definir la posición ante la Diada y ahora la comentaré.

Unió hace un llamamiento a su militancia a participar en todos los actos institucionales en Catalunya y especialmente en la ofrenda floral al monumento de Rafael Casanova. Este Onze de Setembre es muy especial y debemos agruparnos alrededor de la ofrenda, que haremos a primerísima hora de la mañana para facilitar la asistencia a otros actos institucionales. En cuanto a la Via Catalana, sabemos que algunos alcaldes y alcaldesas de Unió han colaborado en su preparación porque personalmente se identifican o porque han sido leales a la voluntad de sus conciudadanos. Otros simplemente no lo han hecho. Todos tienen derecho a hacer lo que han hecho y no por ello unos son más patriotas que los demás. Si ha sido así antes del día 11, también será así este día por la tarde.

No pasaremos lista

Unió no da libertad a su militancia o a sus dirigentes para asistir a la concentración. La libertad de cada uno no depende de la dirección del partido. Lo que el comité de gobierno ha acordado es que cada uno según su criterio haga lo que considere oportuno. Y es lo que harán los dirigentes o los militantes. No pasaremos lista de quién va y de quién no va. No hay ninguna consigna y no se forzará a nadie a tomar una posición u otra. Y esto también sirve para mi presencia o no en la Via Catalana. ¿Iría para defender la consulta? ¡Por supuesto! El año pasado fui a la manifestación en defensa del pacto fiscal. Resultado: me contabilizaron como independentista, eso sí sin que algunos manifestantes independentistas dejaran de increparme, insultarme, lanzarme monedas en la cara y sin que los no independentistas se preguntaran públicamente qué demonios hacía yo en esta manifestación. Por lo tanto, insisto, no pasamos lista y exaltamos la libertad. Yo iré o no en función de mi disponibilidad física y de lo que en conciencia crea que tengo que hacer. ¡Y ya está! ¡Así de sencillo!

Por tanto, ¿habrá militancia de Unió en la Via Catalana? ¡Por supuesto que sí! Como he dicho antes, aunque la apuesta de Unió por ahora al menos no es la independencia, hay militantes que se sienten independentistas y muchos otros irán, a pesar de no serlo, en defensa del ejercicio del derecho a decidir. Recuerdo, por ejemplo, como a finales de agosto el presidente de la Diputación de Girona o el vicepresidente de la de Tarragona --los amigos Joan Giraut y Albert Vallvé, respectivamente-- dijeron claramente que apoyaban la Via Catalana para significar su apoyo al ejercicio del derecho a decidir y no a la independencia. No tengo ninguna duda, pues, que se puede participar en la Via Catalana en defensa, como Unió quiere, del ejercicio de este derecho. Si la ANC ha invitado a participar a la marea amarilla en favor de la escuela pública, la verde de los desahucios y los que pretenden rodear el edificio de La Caixa..., también caben los que defienden el mandato parlamentario del derecho a decidir .

Estoy seguro de que todos los actos de la Diada, incluida la Via Catalana, serán un éxito y expresarán la pluralidad del país y la complejidad del momento. Hay muchísima gente enfadada --¡yo también!-- por la agresión política, económica, financiera, cultural, etc. de las instituciones del Estado hacia Catalunya. Además, hay personas desesperadas por la situación económica y social, mucha gente que lo pasa muy mal que también expresa su malestar. Muchas personas saldrán a la calle con motivo de la Diada para manifestar de una manera u otra su indignación. Bienvenidos sean todos los que puedan contribuir a hacer avanzar los derechos nacionales --entre ellos, el ejercicio del derecho a decidir mediante una consulta-- o los derechos sociales. Siempre tendrán nuestro aplauso. Si lo que aportan a la larga no es otra cosa que frustración, no podremos hacer otra cosa que lamentarlo.

Nos veremos miércoles Onze de Setembre, a las ocho y media, en la ofrenda floral a Rafael Casanova.

Cordialmente,

<strong>Carta setmanal de Josep Antoni Duran Lleida</strong>