¿Qué hacer hoy, 26 de febrero, en Barcelona?

Todas las familias tienen secretos que ocultar lo que ha dado origen a múltiples productos de ficción. En el cine son centenares las películas que aprovechan una celebración como la Navidad o el Día de Acción de Gracias (en el caso de los norteamericanos) para que sus miembros se encuentren y un hecho fortuito provoque que todo salte por los aires y se digan a la cara las verdades con inesperadas consecuencias. Aún peor, en la danesa Celebración, familia y amigos se reunían para conmemorar el aniversario del patriarca y cada vez que había un brindis era para echarse a temblar. Este tema lo aborda ahora Abismes, una comedia gamberra de Dàgata Teatre (el nombre es una referencia a Agatha Christie, ya que varios de sus miembros han participado en sus versiones teatrales), escrita y dirigida por Lluís Altés, que puede verse en la sala Cincómonos.

El escenario representa el despacho de un empresario. A la izquierda, hay una mesita con bebida y un sofá cubierto con una sábana y cojines rosas. A la derecha, una mesa de trabajo con un teléfono, un ordenador portátil y una silla. También hay colgados dos cuadros: en el centro, el del fundador del negocio y, a la derecha, el de la esposa del director. Todo tiene un aire antiguo, casi polvoriento, como si fuera un lugar en el que llevaran trabajando muchos años y para el que no ha pasado el tiempo.

De padre a hijo

Allí se encuentra, el padre, el jefe de todo esto (Enric Cervera), la segunda generación que regenta una empresa de termoplásticos que funciona de maravilla y que le ha permitido alcanzar un alto estatus social, así como tener garantizada la economía familiar. Poco después aparece su hijo menor (Gerard Clavell) y mantienen una conversación. El progenitor le cuenta que ya está cansado de trabajar y que planea jubilarse pronto y cederle el negocio al chico asegurándole que, con el mismo, tendrá la vida asegurada.

Pero el hijo sorprende al padre (y a los espectadores) asegurándole que no tiene la más mínima intención de heredar la empresa ya que pretende hacer realidad su auténtico sueño: convertirse en un actor de películas porno. Esta revelación altera al progenitor que intenta hacerle reflexionar e indicarle que ese no es el camino adecuado ya que es muy inseguro y no le hace falta ya que podría tener un futuro sin problemas al frente de los termoplásticos.

Lo más divertido

Paralelamente, un accidente en la puerta de entrada ha provocado que ambos queden encerrados durante un tiempo sin poder salir de allí. Esta circunstancia contribuye a que ambos empiecen a sacar a la luz sus secretos más íntimos, cada uno más inesperado que el siguiente. Como contrapunto aparece intermitentemente en escena un tercer actor (Bernat Muñoz) que interpreta diversos personajes breves como el encargado de arreglar la puerta o, en plena discusión familiar, vestido como una de esas chicas que salen al ring entre asaltos con un hilarante cartel que ironiza sobre los últimos diálogos.

Durante la charla, el hijo demostrará su limitada cultura con diversos errores gramaticales que convierten la platea en un jolgorio mientras que, ambos, pese a discutir en catalán, remarcan las frases filosóficas importantes para la vida que pronuncian enunciándolas en castellano, como si fueran sentencias. También te hace plantearte cuál de los dos es más conservador, ya que el chico, pese a su aparente mente abierta, no recibe con normalidad lo que le explica el padre y le parece aberrante.

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La sexualidad y el abismo

Una comedia negra y surrealista con el sexo y sus diversas opciones como trasfondo pero que también habla de los filósofos, de la culpa y del perdón, de buscar respuestas y motivos a las conductas más insospechadas. Al final descubrirán que, en el fondo, no se conocen e ignoran la mayor parte de sueños y anhelos del otro, como puede pasarnos a nosotros mismos con nuestros seres queridos. Y es que, a veces, la distancia real entre familiares es tan grande como un abismo.

<div class="ep-film"> <div class="thumb"> <img alt="item" class="loading" src="https://estaticos-cdn.elperiodico.com/clip/clip/79ec9dfc-d1db-4068-8025-212245e21639_media-libre-aspect-ratio_default_0.jpg" pinger-seen="true" data-was-processed="true"> </div> <div class="txt"> <h3>'Abismes'</h3> <p><strong>¿Dónde?</strong> Sala Cincómonos (Roger de Llúria, 128).</p> <p><strong>¿Cuándo?</strong> sábados, a las 21 horas.</p> <p><strong>Precio:</strong> de 14 a 18 euros.</p> <p><strong>Más información:</strong> <a href="https://www.cincomonos.org/abismes.html" target="_blank">Sala Cincómonos.</a></p> </div></div>