Estrenos de cine

Crítica de 'El mal no existe': los ciclos de la naturaleza

Un fotograma de 'El mal no existe'

Un fotograma de 'El mal no existe'

Quim Casas

Quim Casas

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

'El mal no existe'

Director: Ryusuke Hamaguchi

Intérpretes: Hitoshi Omika, Ryo Nishikawa, Ryuji Kosaka

Año: 2023

Estreno: 1/5/24

★★★★

Ryusuke Hamaguchi es uno de los directores más importantes y personales del actual cine japonés. No solo por la repercusión y estilo de algunas de sus obras –‘Asako I y II’, ‘La ruleta de la fortuna y la fantasía’, ‘Drive my car’–, sino porque no se duerme en los laureles y sale de su zona de confort. ‘El mal no existe’ es un buen ejemplo. El mismo tono y forma de dirigir a los actores, pero una estilización distinta y un giro temático. Sobre el papel, un filme más sencillo que los anteriores, de narración transparente… Pero las apariencias (a veces) engañan.

 ‘El mal no existe’ plantea problemas candentes. La construcción de un camping de lujo para que lo ocupen los burgueses de la ciudad los fines de semana pone en jaque el ecosistema de una pequeña localidad, cerca de Tokio. Prácticamente todos los habitantes del pueblo viven en paz siguiendo los ciclos de la naturaleza, una existencia sencilla, humilde, acorde con esos ciclos y lo que les da la tierra. Pero no es solo un filme construido a partir de un discurso ecologista. La crítica acerada a un capitalismo sin fisuras se plantea mediante unos cuantos giros de trama y tono, algunas imágenes extrañísimas que nos desconciertan y momentos sublimes como aquellos que siguen con calma el trabajo cotidiano de uno de los protagonistas.