Obituario

Muere la periodista Anna Pérez Pagès, rigor y compromiso con la cultura

Tras una trayectoria dedicada a la radio y al teatro, dirigió y presentó durante nueve temporadas 'Àrtic', el 'magazín' cultural diario de Betevé

La periodista cultural Anna Pérez Pagès

La periodista cultural Anna Pérez Pagès / EL PERIÓDICO

Anna Abella

Anna Abella

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

"La radio me fascina porque es como el espejo del alma. No necesita focos ni maquillaje. Necesita y contagia básicamente espontaneidad y verdad". Con estas palabras, Anna Pérez Pagès hablaba del medio al que dedicó gran parte de su carrera, pero estas tres frases también la definen a ella, una periodista cultural valiente, rigurosa como pocos y con un enorme espíritu crítico, una mujer entusiasta, vital y comprometida, que nunca se rendía por mal que pintaran las cosas. Este Jueves Santo, tras conocerse su prematura muerte a causa de un cáncer que no le dio opciones, el mundo de la cultura, pero en especial el del teatro y el de la radio que tanto amó y defendió, están de duelo. 

Pérez Pagès fue la cara más visible del desaparecido ‘magazine’ cultural diario ‘Àrtic’ de Betevé, que dirigió y presentó durante 9 años y donde sus entrevistas a figuras de todo el espectro cultural convirtieron en icono el sofá rojo en el que las realizaba. En él, desde 2013 la periodista barcelonesa apostó por un formato ecléctico con reportajes, mesas redondas y entrevistas donde cabían todas las vertientes de la creatividad: los libros, las artes escénicas y las artes plásticas, la moda y el diseño, la gastronomía o el arte urbano. Hasta que en febrero de 2022 Betevé canceló por sorpresa el consolidado y aplaudido programa. ‘Àrtic’ y otros dos espacios de la cadena caían víctimas de los recortes generando una sonada contestación por parte del ecosistema cultural catalán y un alud de apoyo a Pérez Pagès y su equipo. Meses después, en septiembre de 2022, la cadena estrenaba un nuevo ‘magazín’ diario cultural, ‘Plaça Tísner’. Tras el cierre de ‘Àrtic’, la periodista no abandonó la cadena televisiva, sino que ejerció durante los últimos meses de coordinadora de contenidos culturales.  

Vocación prematura

Tenía ya desde niña el ansia de coger un palo o una cuchara y jugar a hacer retransmisiones informativas cual precoz periodista radiofónica. A Pérez Pagès, le iba "la cosa comunicativa". Lo revelaba ella misma en una entrevista en Betevé, tras confesar lo extraña que se sentía estando al otro lado del micrófono y lo mal que llevaba lo de pasar por maquillaje antes de entrar en plató. Siempre escuchaba "mucha, mucha radio", el ‘Bon dia, Catalunya’ lo llevaba integrado desde jovencita, decía. Tenía, de hecho, cinco aparatos de radio en su casa, una en cada habitación. Y de ahí la vocación se hizo grande. 

El pasado octubre escribía un emotivo 'post' en Intagram con una foto de cuando era niña, disfrazada de india. "La niña de la foto no podía prever que cuando se hiciese mayor, habría una época en la que el tiempo se pararía y sería tragada por una especie de no-espacio durante unos meses, y justo allí aprendería que el único lugar donde se puede ser de verdad es aquí y ahora".  

"El oficio más bonito del mundo"

También en febrero de 2022, colgaba una foto de sus primeros años de profesión radiofónica y escribía: "Os juro que en aquellos tiempos dedicarme al periodismo audiovisual y compartir palabras e inquietudes, dudas y pasiones, me parecía el oficio más bonito del mundo. Creo que aún me lo parece. Me gustaría serle fiel a aquella Anna muchos años más". Lo fue hasta el final, comprometida además con el feminismo y el progresismo y la cultura en mayúsculas.

Una visita al campus de la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB) la desvió de estudiar allí Periodismo: con 17 años le impactó un cartel gigante en la entrada del campus que decía ‘Basta de violaciones en el párking de la Autónoma’ y prefirió poner distancia con aquel foco de violencia machista y decantarse por la Filología inglesa en la Universitat de Barcelona, no en vano le gustaba mucho leer y escribir. Luego se sumaría a segundo ciclo de Periodismo en la Pompeu Fabra y su pasión por la escena la conduciría a estudiar Dramaturgia y dirección en el Institut del Teatre y a diplomarse en Artes Escénicas por la UAB. 

"Pequeña gran familia"

Durante sus pinitos en COM Ràdio, donde inició su trayectoria profesional en 2000, formó parte de los espacios ‘Viatge a Ítaca’ y ‘Les tardes’ y dirigió y presentó el ‘magazin’ cultural diario ‘ICULT.COM’, en colaboración con EL PERIÓDICO. En la redacción de COM Ràdio conoció al desaparecido Joan Barril, que en 2008 iba a empezar a dirigir y presentar en la entonces BTV el programa de libros ‘Qwerty’, en el que se habían embarcado sus colegas y amigos David Guzmán y Ricard Ruiz Garzón, que la animaron a dar el salto a la televisión. En "aquella pequeña gran familia", como recordaba aquellos días, ya esgrimía el micrófono haciendo reportajes literarios y entrevistando a escritores, mientras lo compaginaba con su programa de radio de madrugada. 

Pérez Pagès colaboró durante su trayectoria en distintos medios de comunicación, entre ellos, el suplemento ‘Libros’ de EL PERIÓDICO, en el que el periodista Carles Geli la fichó en 2006 para escribir crónicas y críticas; en Catalunya Ràdio (en los programas 'El Suplement', 'La Tribu' y ‘El Secret’, entre 2009 y 2016); o en la teatral ‘Revista Pausa’. También presentó y moderó coloquios para el TNC, dirigió talleres de Comunicación Cultural y Redes Sociales en la Bienal de Venecia y en la Pompeu Fabra, donde fue profesora del Master d’Edició durante cuatro años. Tan incansable como audaz, fundó Mipiatxe, una productora especializada en creación y gestión de contenidos en redes sociales enfocados, cómo no, al ámbito audiovisual y cultural. La mantuvo, con el rigor y el brazo fuerte con que lo hacía todo, 13 años. 

En 2020, Pérez Pagès colgaba en Twitter uno de sus poemas preferidos de aquel año maldito, de Mireia Calafell. "Dir-te adeu era això: / veure com cremen boscos / i ser jo tots els arbres. / També la pluja ferma / que ha començat a caure". Muchos de los que la conocieron se sentirán ahora en esos versos. Y, como escribía en Instagram, pensarán que, pese a todo, "volveremos a bailar, volveremos a hacer el indio y seguiremos amando".