Festival de verano de Barcelona

Dimitris Papaioannou vuelve a escena con 'Ink' en el Grec

El aclamado creador griego ofrece un espectáculo diferente, rodeado de agua y acompañado por otro intérprete

Diez espectáculos clave del Grec 2023

Eu Manzanares une ópera y reivindicación social en 'Nessun dorma'

ink

ink

Marta Cervera

Marta Cervera

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El artista griego Dimitris Papaioannou (Atenas, 1964), un mago a la hora de construir sugerentes mundos, regresa al Festival Grec con 'Ink' donde comparte escenario con el actor Šuka Horn. El tercer protagonista es un pulpo cuya tinta da nombre al espectáculo y el agua, un elemento vital en una puesta en escena que traslada al espectador a un mundo extraño. ¿Cuál es la relación entre ambos hombres? ¿Son padre e hijo? ¿Rivales? ¿Amantes? Eso deberá imagirnarlo cada cual. El creador no quiere influir. "No me gusta explicar mis espectáculos. Cada cual debe meditar sobre su significado. No quiero imponer mis opiniones", explica el autor de sorprendentes obras como 'The great tamer', con la que debutó en el Festival Grec en 1017 y 'Transverse orientation' en 2021, cuyas dos últimas funciones fueron canceladas a causa de un caso de covid en la compañía.

'Ink' se representará en el Teatre Lliure a partir de este lunes y estará en cartel hasta el miércoles. En la última función su rol lo hará Haris Fragoulis. "Hacía unos 10 años que no actuaba. Como me estoy haciendo mayor pensé que si no lo hacía ahora tal vez no volvería a salir a escena". Y añade: "Ahora soy físicamente menos fuerte pero mi cuerpo tiene una madurez que antes no tenía. Mi disposición a exponer el cuerpo y mis debilidades son diferentes. Todo cambia".

"Ahora soy físicamente menos fuerte pero mi cuerpo tiene una madurez que antes no tenía"

Su intención era buscar maneras de relacionar a dos hombres en escena. Él aparece siempre vestido mientras que su compañero, más joven, está desnudo. "Buscaba algo interesante que surgiera del encuentro de dos personalidades específicas. No hay una narración lineal. Hay muchas capas en este trabajo. Y, aunque me parece más oscura que otras de mis piezas, tampoco estoy del todo seguro de eso". Veremos qué opina el público.

Mundo sombrío

El teatro físico, los mitos y el mundo del arte se combinan en las plásticas propuestas de Papaioannou. "Esta obra tiene un aspecto más sombrío. Se aleja del Renacimiento y aunque conserva cierto clasicismo es más expresionista", señala. "No es algo buscado. Son cosas de las que me percato después de tener la obra montada. Solo entonces me doy cuenta de todas las capas que contiene". Explica así el origen del título del espectáculo: "Lo puso un amigo mío. Yo no lo hago nunca. Le dejo él elegirlos". En esta ocasión le puso 'Ink' por "la acción de extraer tinta negra de un animal, de una bestia, con el que puedes escribir, pintar y crear esculturas". Aclara que el pulpo, aunque lo parezca, no es real.

"Esta obra tiene un aspecto más sombrío. Se aleja del Renacimiento y aunque conserva cierto clasicismo es más expresionista"

Antes de interesarse por la danza, Papaioannou estudio Bellas Artes trabajó como artista visual, ilustrador y creador de cómics. Coeditó el fanzine contracultural Kontrosol sto Haos (1986-1992) con contenido abiertamente gay y triunfó internacionalmente como director artístico de las ceremonias de apertura y clausura de las Olimpiadas de Atenas de 2004.

Desde el estreno de su primera coreografía 'The mountain' en 1987 hasta hoy el panorama de la danza contemporánea en Grecia ha cambia de forma radical. "La situación es ahora mucho mejor que cuando yo empezaba. En los últimos 10 años han surgido interesantes artistas y hay un mayor interés de los programadores internacionales".

"La situación en Grecia es ahora mucho mejor que cuando yo empezaba. En los últimos 10 años han surgido interesantes artistas"

Recuerda que antes de la crisis económica en 2008 la situación era otra. "La crisis hizo que muchos se fijaran en Atenas descubrireron que había una escena de vanguardia y que había artistas como yo que llevábamos años trabajando". El mercado internacional presta atención y eso ha beneficiado a la escena de su país. "Recientemente ha emergido un fantástico creador albanogriego: Mario Banousi. Su trabajo se presentó en el Teatro Nacional junto al de otros jóvenes creadores en un encuentro organizado para programadores internacionales. ¡Esto era ciencia ficción cuando yo empezaba!".

Poner en contacto la fertilidad creativa de Grecia y los programadores ha ayudado a emerger a nuevas voces. Cita a Euripides Laskaridis, Christos Papadopoulos y, recomienda muy especialmente, a la coreógrafa Kat Valastur asentada en Berlín. "Está realizando un trabajo muy interesante".