Josep Bofill: "Queremos acercar la gente al mar y al sector de la pesca"

-¿Cómo ha recibido L’Escala el premio a mejor pueblo del año en la categoría de pueblos marítimos?

-Estamos muy contentos, cuando nos presentamos, no esperábamos acabar recibiendo el premio. Sin embargo, sabíamos que cumplíamos con todos los criterios para poder ganar. Además, L'Escala está de moda. Realmente, hemos hecho mucha difusión y la gente se ha volcado con la iniciativa. Por lo tanto, estamos muy orgullosos de haber obtenido este premio.

-Uno de los motivos por los que se ha considerado l’Escala como pueblo merecedor de este galardón es el proyecto Viu en Blau, ¿nos puede explicar en qué consiste?

-Viu en Blau es una iniciativa a través de la cual queremos acercar la gente al mar y al sector de la pesca. L’Escala es uno de los puertos de pescado azul más importantes que hay en Catalunya, especialmente de anchoa y sardina, pero también de otras especies como el bonito o la caballa. Además, es uno de los enclaves marítimos en los que todavía se mantiene esta tradición pesquera de la telaraña y tenemos hasta cuatro barcas preparadas para la práctica de esta modalidad de pesca aquí en L'Escala. Tal y como está configurado el pueblo, el puerto queda algo alejado del centro residencial. El proyecto Viu en Blau busca crear sinergias entre el tejido residencial, comercial y educativo y el mundo de la pesca, y lo hace a través de charlas, jornadas gastronómicas y difusión en las escuelas, entre otras iniciativas. Se trata, por lo tanto, de acercar el mundo de la pesca de pescado azul a la sociedad escalena.

-Además, como cada año, a principios del mes de octubre comienza la fiesta de la anchoa, ¿Qué actividades tienen programadas?

-La anchoa es el producto por excelencia de L'Escala, y es reconocido en todo el estado. Seguramente, la de L’Escala y la de Santoña, en el mar Cantábrico, son las anchoas más populares a nivel estatal e, incluso, internacional. Este año vuelve la Festa de la Anxova y con ella también recuperamos la ruta de la tapa de la anchoa. Se trata de un itinerario consolidado que, desde hace un par de años, se celebra durante dos semanas. Se decidió ampliar su duración porque antiguamente se concentraba todo en un fin de semana y la gente nos pedía más. Así, este mes de octubre alargaremos la temporada veraniega o temporada alta de turismo y la fiesta nos servirá para acabar de desestacionalizar estos dos meses en los que se suele concentrar más gente. 

-Durante la recogida del premio, reivindicó los activos del pueblo más allá de la anchoa, ¿Podría mencionarlos?

-Desde al Ayuntamiento de L’Escala, intentamos hacer mucha difusión de todo aquello relacionado con el patrimonio escalense, que llevamos preservando desde los inicios del pueblo. L’Escala nació a través de la pesca, a través del mar, de la playa. Tenemos el Alfolí de la Sal, el edificio histórico que alberga el museo de l'Escala, que es el máximo representante y estandarte de la comercialización de la anchoa. Y es que, antiguamente, la sal era primordial para el mantenimiento y la conservación del pescado. Además, también estamos potenciando nuestro patrimonio con la recuperación de una antigua embarcación, la Paca, que fue el estandarte de la construcción de barcas de pesca para el uso de telarañas. La recuperaremos, la renovaremos y la utilizaremos como barca museo. Por otra parte, tenemos organizada una ruta relacionada con el patrimonio pesquero de L’Escala, que pasa por el Alfolí de la Sal, el Museo de la Anchoa Universal y otros lugares de interés. Por lo tanto, cuidamos mucho todo lo que forma parte de nuestro patrimonio y también hacemos mucha difusión de todo lo relacionado con el mar de Empúries, dentro de la bahía de Roses, que tiene una importancia trascendental porque fue por donde llegaron las civilizaciones griega y romana.

-¿Cuáles cree que son los principales retos del pueblo en el sector marítimo y pesquero?

-L´Escala, como todos los pueblos turísticos, tiene retos en relación con los servicios. Tenemos una población que cambia mucho entre las temporadas de verano e invierno. Dimensionar los servicios dependiendo de estos cambios es muy complicado. En este sentido. uno de nuestros principales retos es mejorar la conectividad y la digitalización del pueblo. Por otra parte, creo que, en lo que se refiere a la promoción turística y cultural del pueblo, estamos en una muy buena posición, son más de 900 las actividades que se organizan a lo largo del año. Por tanto, tenemos un pueblo muy activo y debemos mejorar en estos servicios que ofrecemos a nuestros visitantes.