El Liceu inaugura su nuevo curso con una comedia

El Gran Teatre del Liceu levanta el miércoles el telón de su temporada con la última obra maestra de Donizetti, la ópera bufa ‘Don Pasquale’, una comedia agridulce y con una importante carga de crítica social que contará con dos repartos y algunas de las mejores voces españolas de la actualidad. La ópera belcantista –nueve funciones hasta el 9 de octubre– continúa con las celebraciones del 175º aniversario del Liceu, cuyos fastos comenzaron en abril pasado y que se extenderán hasta julio de 2023. La víspera de la inauguración con ‘Don Pasquale’, el director musical de la Opéra National de Paris, Gustavo Dudamel, ofrecerá en el escenario de La Rambla un concierto con la orquesta del coliseo parisino en el que se interpretará la ‘Novena sinfonía’ de Gustav Mahler.

El arranque de la temporada lírica llega en una propuesta del director de escena italiano Damiano Michieletto –estrenada en 2018 en París–, y con el responsable musical del Gran Teatre en el podio, Josep Pons. En la presentación del montaje, el director artístico del Liceu, Víctor García de Gomar, se congratulaba de poder contar con repartos en los que brillan auténticas estrellas españolas de la lírica, reivindicando el talento local. Carlos Chausson, Xabier Anduaga y Sara Blanch figuran en el primer ‘cast’, mientras que Carles Pachón y Serena Sáenz lo hacen en el segundo: un veterano como Chausson, que ha hecho de Don Pasquale una de sus grandes creaciones, rodeado de jóvenes talentos de repercusión internacional.

Carlos Chausson aseguró que esta es una ópera ideal para iniciarse en el género. Este ‘dramma bufo’ que explica “la crueldad con la que trata a Don Pasquale el resto de personajes de la obra” se mueven en un juego teatral en el que todos tienen una doble cara. El bajo-barítono zaragozano se encuentra “encantado” de interpretar la obra “junto a una serie de jóvenes estrellas que son el futuro cuando yo ya soy un poco el pasado”.

La soprano Sara Blanch afirma que siempre intenta buscar “una parte de bondad” tanto en sus personajes como en las personas. “Es difícil justificar el comportamiento de Norina, que llega a ser incluso cruel con Don Pasquale. Pero como es el amor lo que mueve a los personajes, pienso que ella hace lo que sea por conseguir a quien ama, reivindicando además su libertad y defendiendo su territorio. La trama está tan bien construida teatralmente que eso ayuda mucho a la interpretación a nivel musical”, aclara.

Damiano Michieletto, uno de los directores de escena más destacados del panorama internacional, piensa que esta ópera de Donizetti “es un regalo para el público de hoy. En la comedia se habla de situaciones humanas, y por eso son muy importantes los personajes, más que el punto de vista del director de escena. Hay que tener muy en cuenta los diálogos, aquí de un gran valor. En esta producción he usado temas clásicos y humanos universales que conmueven”. Ha escogido para ello “un ambiente contemporáneo, brindando por una parte fuerza a lo divertido de la obra, pero sin olvidar lo melancólico que tiene la trama, especialmente ante el personaje de Don Pasquale”.

Víspera parisina

El martes 20 el Liceu barcelonés calienta motores ante su inminente inauguración con un concierto extraordinario a cargo de la Orquesta de la Ópera de París que estará dirigida por el flamante director musical del coliseo parisino, el venezolano Gustavo Dudamel. Enmarcado en una gira que entre el 16 y el 22 de septiembre visita la Philharmonie de París, el Liceu y el Victoria Hall de Ginebra, la parada liceísta es fruto de un acuerdo de intercambio entre el Gran Teatre y la Opéra que tenía que realizarse el curso pasado, pero que se pospuso debido a la pandemia.

Dudamel considera que la ‘Novena Sinfonía’ de Mahler “conecta muy bien con una orquesta de ópera”, como es el caso. “Es una obra sinfónica, pero su música, su estructura, tiene un aspecto muy teatral”, asegura. Como opinan muchos responsables musicales de teatros líricos, el maestro venezolano cree que es importante “sacar a la orquesta del foso para dar a conocerla también como el maravilloso instrumento sinfónico que es”. Con unos precios desorbitados que se enfilan hasta los 255 euros, la convocatoria, sin embargo, agotó las localidades a las pocas horas de salir a la venta.