Un acuerdo entre trabajadores y estudios evita la huelga en Hollywood

Luces, cámara, acuerdo, acción. Los rodajes en Hollywood, que corrían el riesgo de paralizarse este lunes por la amenaza de huelga de decenas de miles de sus trabajadores, van a continuar sin descanso después de que el sábado se anunciara un principio de acuerdo entre el principal sindicato de los trabajadores, IATSE, y los grandes estudios reunidos en la Alianza de Productores de Cine y Televisión (AMPTM por sus siglas en inglés) para un contrato de tres años con el que los técnicos de la industria logran algunas de las mejoras que reclamaban en sus condiciones laborales.

“Este es un final de Hollywood”, proclamó el presidente del sindicato IATSE, Matthew Loeb, en el comunicado en el que, poco más de un día antes de que expirara el plazo que su organización había dado para iniciar la huelga, se anunció el acuerdo con la organización que representa a estudios como Walt Disney, Warner, Paramount, Apple, Netflix y Amazon.

Hollywood se asoma a una huelga histórica

El pacto afecta de momento a 40.000 trabajadores en la costa oeste y ahora debe ser ratificado por esos afiliados. A la hora de escribir estas líneas proseguían las negociaciones en busca de acuerdos similares que cubran a 20.000 trabajadores más en otras partes del país que son también fundamentales para la industria y los rodajes como Nueva York, Georgia, Luisiana, Nuevo México e Illinois, pero domina la sensación de que se alcanzarán, especialmente en un momento en que la industria está pisando el acelerador para recuperarse del golpe que dio la pandemia y adaptarse a la incrementada demanda y se reconoce, como hacía desde el anonimato un ejecutivo de televisión en el ‘Los Angeles Times’, que “una huelga no sería buena para nadie”.

Más descanso, mejores sueldos

Entre lo conseguido en las negociaciones, donde los trabajadores recibieron fuertes apoyos de otros actores de la industria y de políticos, está la garantía para los técnicos de que se incrementarán sus descansos tanto en fines de semana como entre semana. Además, se ha logrado que el convenio para los tres próximos años incluya subidas en los sueldos de los trabajadores peor pagados, mejoras en los salarios y condiciones de trabajo en los rodajes de proyectos de plataformas de streaming, subidas salariales retroactivas del 3% anual y un compromiso para cubrir un déficit de 400 millones de dólares en el plan de pensiones y cobertura sanitaria del sindicato.

El acuerdo llega en un momento especial en EEUU, cuando los trabajadores están sacando músculo ante las empresas. Y Loeb, el presidente del sindicato, puso su pacto como ejemplo. “Nos medimos frente a frente con algunas de las compañías de entretenimiento y tecnología más ricas y poderosas del mundo y hemos logrado un acuerdo que cubre las necesidades de nuestros miembros”, destacó. Apuntó, asimismo, a su éxito como un modelo potencial para otros trabajadores tanto en su industria como en otras como las de tecnología, videojuegos o en la llamada “gig economy”.

“Como trabajadores no afiliados a sindicatos o freelancers, muchos de nuestros trabajadores van a trabajar en distintos horarios y localizaciones y para distintas empresas. La diferencia”, dijo Loeb, “es que nuestra gente tiene cobertura sanitaria y prestaciones de jubilación, puede negociar para mejores sueldos y condiciones y tener una voz y poder porque trabajan a través de su sindicato. La solidaridad”, concluyó, “es más que una palabra. Es una forma de conseguir cosas”.